NEUQUÉN (AN).- El personal de la Dirección Provincial de Estadística y Censos afiliado al gremio ATE se volvió a declarar ayer en asamblea permanente, y adelantó que podría haber paros sorpresivos en el organismo encargado de realizar, entre otras mediciones, la de la evolución de los indicadores económicos de la provincia.
La medida de fuerza fue lanzada para presionar y conseguir una negociación con las autoridades, que dejaron sin efecto contratos del personal. A principios de mes, el personal ya había denunciado la no renovación de contratos para este organismo.
ATE desconoce el tipo de convenio que se aplicó a sus reemplazantes.
Asegura que convierten a los nuevos trabajadores en "prestadores de servicio", algo que no tendría en cuenta derechos laborales de los que gozan empleados estatales.
La delegada del sindicato, Mariana Sarin, afirmó que por otra parte a los ex empleados se les adeuda parte de los sueldos. "Las medidas de fuerza van a continuar hasta que se habilite una mesa de negociaciones", dijo.
El nuevo foco de conflicto surge a pocas horas de que el gobierno haya logrado un acuerdo con los porteros afiliados a este sindicato, que habían mantenido en vilo a las instituciones educativas desde el comienzo del ciclo lectivo.
Este sector, uno de los más combativos del arco sindical opositor, decidió aceptar la oferta que hizo el gobierno el viernes pasado. Con eso, deberían culminar los problemas de inactividad en escuelas. El acuerdo implica el pago de 150 pesos remunerativos y no bonificables, el no descuento de los días de paro, algo que en algunos casos había reportado mermas de hasta 1.000 pesos, y la apertura de una mesa bimestral, con la finalidad de discutir la posible incorporación al básico de las sumas remunerativas y no bonificables.
Este acuerdo se completa con el pase a planta de 203 auxiliares.