CIPOLLETTI (AC).- Fiscalía y querella, con adhesión de la defensora de menores, pidieron dos años de prisión en suspenso y cuatro de inhabilitación para una médica sospechada de presunta mala praxis, en Cipolletti. La defensa requirió la absolución por entender que la pediatra "no tuvo responsabilidad" en el hecho. La sentencia se conocerá el 4 de mayo.
Los alegatos se realizaron ayer y, como el resto del debate, fueron a puertas cerradas porque la víctima es menor de edad. Tenía casi dos años cuando en octubre de 2003 ingresó al hospital de Cipolletti por quemaduras de tipo A y A-B y terminó con daños neurológicos y visuales, entre otros.
La acusación no pidió la pena máxima por lesiones gravísimas culposas (que es de 3 años de prisión) pero se alejó de la mínima y tanto la fiscal Rita Lucía como el querellante Leandro Segovia entendieron que la médica Mónica Reyna debe ser condenada. La defensora de menores Alicia Merino, adhirió.
"Quedó claramente establecido que el chico no sufrió ninguna intoxicación morfínica", opinó Oscar Pandolfi, uno de los defensores de la médica. Pero la acusación afirmó todo lo contrario.