La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) mantiene una deuda con las empresas frutícolas regionales de algo más de 75 millones de pesos por la falta de liquidación de reintegros a las exportaciones y el recupero de IVA con el que cuentan las empresas que comercializan con el exterior.
El dato no es menor teniendo en cuenta la falta de liquidez que hoy existe en toda la región del Valle de Río Negro y Neuquén y los problemas financieros que este escenario trae aparejado para la actividad.
Tanto el recupero de IVA como los reintegros a las exportaciones las empresas frutícolas los venían cobrando con retrasos significativos, pero ya hay antecedentes en algunas firmas que muestran demoras superiores a los 10 meses.
Esta semana directivos de la CAFI -junto con otras cámaras exportadoras- se reunieron en Buenos Aires con funcionarios de la AFIP para intentar destrabar estos fondos. No sólo no hubo avances, sino que todos los permisos de embarques que están supeditados al control de la AFIP fueron objetados, horas después de esta reunión, por el organismo oficial como "trámites de opacidad fiscal".
Esto significa, tal como se lo señalaron los mismos funcionarios de la AFIP al ser consultados por el tema por los empresarios regionales, que las exportaciones realizadas por la actividad son "poco transparentes" en materia fiscal y que todas las operaciones pasaron a ser "observadas" por la AFIP, por lo que no se pueden otorgar los "beneficios" de los reintegros y recupero de IVA. Es decir: el Estado no tiene intenciones de pagar, por ahora, esa deuda que mantiene con las frutícolas.
Según datos consignados por el sector privado, los pasivos que la AFIP mantiene con las empresas frutícolas por reintegros ascienden a los 11 millones de dólares, mientras que por recupero de IVA la cifra supera los 35 millones de pesos.
"Sin dudas este es un grave problema para la actividad ya que la AFIP retiene fondos que les pertenecen a las exportadoras y que son necesarios para poder hacer frente a los compromisos de la temporada", aseguró en comunicación con este diario.
Según se supo, esto no sólo pasa con la fruticultura regional. Las distintas actividades exportadoras del país están siendo afectadas por esta nueva ofensiva del titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, quien acusa a muchos de los sectores productivos de estar "trabajando con paraísos fiscales para evadir impuestos".
La realidad muestra que este dinero que no llega a la región podría afectar la cadena de pagos de la actividad. Hoy ya se observa la falta de liquidez que existe en la plaza. Los pagos de las empresas exportadoras a proveedores continúan postergándose y muchas de estás últimas se encuentran en serios problemas por no disponer del dinero para sus obligaciones.
Los exportadores regionales no dudan al señalar que gran parte del financiamiento de la actividad llega hoy de la mano de los proveedores pero también son conscientes que este esquema no es sustentable en el tiempo.
"Nuestra actividad no trabaja con paraísos fiscales. Por lo tanto es un error lo planteado por la AFIP y las retenciones que hace sobre fondos que nos pertenecen", confió sobre el final de la conversación Rosauer.