José Arce, el viudo detenido el martes pasado como presunto instigador del crimen de su esposa, Rosana Galliano, declaró ayer y negó haber contratado un sicario para el homicidio. Negó además conocer a los testigos que lo identificaron como el instigador del crimen.

Durante dos horas, Arce declaró ante el fiscal de Zárate- Campana Marcelo Pernici sabiendo que de resultar condenado podría recibir prisión perpetua, ya que se lo acusa de "homicidio agravado por el vínculo". Al igual que en sus anteriores indagatorias en viudo de 53 años aseguró ser "inocente" y dijo que no tuvo "nada que ver" con el asesinato de su mujer, ocurrido la noche del 16 de enero de 2008 en la casa de El Remanso, donde había vivido la pareja.

Una mujer fue quien más comprometió a Arce con su testimonio, ya que aseguró haber presenciado una reunión entre Arce, su madre Elsa Aguilar (acusada de haber financiado el crimen con 20.000 dólares) y Gabriel Leguizamón, el sujeto señalado como el autor material del hecho y con quien Arce tiene, según admitió, "una cierta amistad".

La situación procesal de Arce aún no está definida pero permanecerá, al menos por los próximos días, detenido en la seccional primera de Campana.

Hoy está previsto que declare la madre del viudo y el viernes lo hará Gabriel Leguizamón.

"Existen elementos suficientes" para creer que Arce, su madre y Leguizamón (junto con su hermano Pablo) participaron del homicidio, sostuvo ayer el fiscal Pernici.

El hallazgo de vainas y plomos iguales a los encontrados en el cuerpo de la víctima, cerca de la casa de los Leguizamón (ambos detenidos) fue un elemento fundamental para el nuevo gran paso en la investigación.

En las puertas de la fiscalía tanto Arce como su madre acusaron a los hermanos de Rosana Galliano de impulsar la investigación porque "quieren plata".

Antecedentes de violencia

Reynaldo Galliano, padre de Rosana, acusó a su yerno y afirmó que Arce es "un lobo disfrazado con piel de cordero". "Ya hacía unos años que venía maltratando a Rosana", dijo.

Esa circunstancia está probada por las numerosas denuncias y exposiciones policiales que realizó la víctima durante los cuatro últimos años del matrimonio, cuando el perfil violento de Arce salió plenamente a la luz.

Por su parte, Graciela Rodríguez, madre de joven, pidió a la justicia la tenencia de sus nietos, de 6 y 4 años, quienes hasta ahora habían estado bajo la guarda de su padre pese a las sospechas que lo vinculan con el crimen y a que, en los últimos tiempos de la pareja, después de su separación, la justicia le había prohibido acercarse a menos de 300 metros de la casa donde vivían Rosana Galliano y los nenes, justamente a causa de sus antecedentes violentos. (Télam / DyN)