BUENOS AIRES (DyN) - La presidenta Cristina Fernández recibió snoche al Consejo Directivo ampliado de la CGT, encabezado por su secretario general Hugo Moyano, durante una reunión en que las partes acordaron "trabajar en conjunto para mantener el nivel de actividad y de empleo".
Entre las escasas noveddaes del encuentro, figuró un pedido de aumento de asignaciones familiares y el planteo de un "seguro de desempleo" o de posible aplicación para empresas en crisis. El proyecto, elaborada por el abogado laboralista de la CGT y diputado nacional, Héctor Recalde, se financiaría con fondos provenientes del 1% de la recaudación por retenciones a las exportaciones de la soja, otro 1% de la masa salarial a cargo de los empleadores y otro 1% de los sueldos, que aportarían de manera voluntaria los trabajadores.
El estudio del plan fue relativizado al término de una hora cuarenta de reunión en la Casa de Gobierno por el jefe de Gabinete, Sergio Massa, el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, y el secretario de prensa de la CGT, Héctor Daer. "No pasó nada, todo sigue igual", fue la síntesis de uno de los sindicalistas participantes que, tal como habían acordado previamente, se negó a hablar ante la prensa. Según explicó el vocero de la central obrera, se habló sobre las propuestas del gremialismo para "fortalecer" las asignaciones familiares y el seguro de desempleo, pero "no hubo respuestas", dijo.
"Coincidimos tanto desde el gobierno como desde la CGT en hacer todos los esfuerzos para mantener los puestos de trabajo", señaló Daer.
Por su parte, Tomada admitió que se habló del "mercado de trabajo", pero dijo que "las paritarias tienen su propia norma con la característica este año de la heterogeneidad por las distintas situaciones económicas de los sectores". "Se acordaron sumas fijas y porcentajes, algunas comenzaron y otras no. Se pidió por las asignaciones familiares y seguro de desempleo, pero éstas serán demandas a discutir" explicó.
Ambas partes negaron que la situación financiera de las obras sociales y la disputa entre la CGT y la ministra de Salud, Graciela Ocaña por esos fondos.
Previo al encuentro con los 40 dirigentes sindicales, la primer mandataria y Moyano estuvieron reunidos 30 minutos a solas.