ALLEN (AA).- Ayer por la mañana uno de los edificios históricos de Allen volvió a reabrir sus puertas: la sucursal del Correo Argentino retornó -después de varios años- a su lugar de origen, un pintoresco edificio ubicado en el corazón de la comuna. Cuando el reloj marcó las 8:30, el sueño de los empleados del Correo Argentino se hizo realidad. La familia postal regresó a trabajar en su propia casa, el viejo edificio de la calle Tomás Orell.
Algunos meses atrás comenzaron los trabajos de reparación y se realizaron distintos arreglos en la sala de carteros, salón de ventas, jefatura. También se restauró la fachada que se encontraba repleta de afiches, grafitis y pintadas. Todo se efectuó mediante una decisión de la empresa, que supo recepcionar el pedido de retorno de los trabajadores.
Las instalaciones del correo habían sido desocupadas en el 2003 y desde ese entonces atravesaron un período de abandono. Durante la gestión del ex intendente Carlos Sánchez, el municipio intentó lograr la posesión del edificio valiéndose de una documentación antiquísima, acción que concluyó en un litigio judicial y que tensó la relación entre el Ejecutivo y la empresa.
Un buzón de hierro fundido y un carretón en el que se trasladaban las encomiendas y la correspondencia son algunos de los elementos que fueron restaurados ."Cumplí el sueño del pibe de volver a casa", indicó a "Río Negro" con mucha emoción Jacinto Palavecino, un empleado que tiene 45 años de antigüedad.
