Fue levemente superior durante todo el partido y por eso debió luchar a capa y espada para sumar de a tres y ser, al menos hasta hoy, el único escolta del Clausura. Vélez encontró la victoria ante el Banfield (2-1) de Falcioni (que regresó) a nueve del final gracias a un zurdado de Maxi Moralez.
Los primeros 45 fueron friccionados y con pocas situaciones. El que tomó la iniciativa fue el equipo de Gareca, que intentó ponerle un poco de fútbol a la noche, aunque lo logró poco.
El único que entendió hacia dónde tenía que ir el destino del cotejo era el “Chapa” Zapata, que en la generación de juego estuvo demasiado solo. Igual, a los 15 el activo Rodrigo López armó una buena jugada pero no llegó a concretar Cubero, y tres minutos después contestó el “Taladro” con un centro al corazón del área que casi empuja al gol Barrales.
El Amalfitani estalló cuando, a un minuto del descanso, el uruguayo López cambió silbidos por aplausos con una perfecta media vuelta que se metió bien abajo.
En el complemento el local siguió siendo más, manejó la pelota y creó las mejores situaciones en los primeros minutos. Pero a los 10 la defensa marcó mal al grandote Barrales, que peinó para la entrada de Bertolo, quien empató e imitó al “Topo” Gigio, un gesto con dedicatoria.
Vélez fue el que propuso el golpe por golpe y buscó la ventaja. Clara fue la de los 25, cuando el movedizo pero hasta ahí poco impreciso Maxi Moralez no pudo conectar bien un centro desde la izquierda.
Los de Falcioni se metieron atrás y aguantaron los embates locales hasta que los ingresados Cristaldo y Velázquez combinaron y Moralez encontró un balón que mandó a la red. Así, Vélez se prende y sueña.
El uruguayo López puso el primero y Moralez clavó el 2-1 final.