LONDRES (DPA).- La familia y los amigos de la estrella del reality show británico "Big Brother" Jady Good se despidieron ayer de la difunta en el barrio periférico londinense Buckhurst Hill ante las cámaras de tevé, que en todo momento siguieron en directo el funeral.
Toda la ceremonia, tanto en Buckhurst Hill como la procesión fúnebre por las calles de Londres, se convirtió, de acuerdo con el último deseo de la que concursó tres veces en el reality show "Big Brother", en un macroacontecimiento mediático.
Miles de curiosos y de fans de Goody se reunieron alrededor de la iglesia, para seguir la ceremonia fúnebre a través de enormes pantallas dispuestas para el público.
Millones de británicos fueron también testigos desde sus casas del acto, ya que se retransmitieron en directo las palabras pronunciadas en la ceremonia, así como las imágenes proyectadas en las inmensas pantallas colocadas ante la iglesia, en un canal de televisión de noticias.
También la procesión fúnebre por la estrella del reality show británico, que utilizó su cáncer terminal para obtener rendimiento económico de la televisión, fue objeto de un impresionante despliegue mediático. Cuando la comitiva cruzó el Tower Bridge de Londres se efectuó una parada a fin de conceder a los fotógrafos tiempo suficiente para realizar tomas del evento.
Desde helicópteros las cámaras de televisión seguían cada kilómetro de la procesión. Miles de personas se pararon en las aceras para contemplar el espectáculo o para dar su último adiós a la que era madre de dos hijos.
La joven de 27 años falleció el 22 de marzo a causa de un doloroso cáncer terminal en el cuello uterino. La venta de los derechos de la boda, de su muerte, su entierro y de artículos para fans supuestamente le ha reportado en total una suma de más de 5,8 millones de dólares.