LIMA.- El ex presidente peruano Alberto Fujimori volvió a negar ayer haber ordenado matanzas y violaciones a los derechos humanos durante su gestión al frente del Ejecutivo de su país, en tanto el tribunal que lo juzga anunció para el martes el fallo que puede enviar al ex mandatario a la cárcel por hasta 30 años.

En su segundo y último día de alegato en su defensa, Fujimori lamentó que la acusación actúe en su contra "con un odio personal y mediático", que la llevó a generar "un andamiaje legal a lo Frankenstein" para que se le sentencie, aunque no hay pruebas en su contra. "No he conocido al destacamento Colina", enfatizó el ex mandatario respecto a la organización militar que perpetró las dos masacres por las que se le acusa, y aseguró que las cartas de felicitación que dirigió al grupo fueron por sus análisis de inteligencia y formaron parte de cientos de documentos que firmó "por trámite".

Fujimori, de 70 años, dedicó la mayor parte de su exposición a descalificar las pruebas presentadas por la fiscalía, que, dijo, "deben haber pasado a la historia del folclore judicial".

El acusado apeló a términos como "grotescos", "absurdos" y "descabellados" para referirse a las argumentos de la Fiscalía y la parte civil, basados, según él, en "suposiciones".