La presidenta Cristina Fernández visitó hoy la casa del líder radical Raúl Alfonsín, adonde concurrió para brindar personalmente sus condolencias a los familiares del ex primer mandatario, fallecido el martes pasado.
La jefa de Estado calificó de "muy cálida" la reunión que, durante 1 hora 43 minutos, mantuvo con los hijos del ex jefe de Estado en el departamento de avenida Santa Fe al 1600, en el barrio porteño de Recoleta.
La primera mandataria, al salir de la cochera del edificio, bajó brevemente el vidrio del vehículo que la trasladaba y señaló ante la prensa que se había sentido "muy bien" de acompañar a los familiares de uno de los máximos dirigentes radicales.
Tras partir rápidamente del lugar, casi sin tomar contacto con los periodistas que cubrían el acontecimiento, Ricardo Alfonsín, uno de los hijos del ex mandatario, expresó el agradecimiento de su madre y de sus hermanos por el gesto presidencial.
Ante el fallecimiento de Alfonsín, la Presidenta anticipó un día su retorno al país desde Londres, donde participó de la Cumbre del Grupo de los 20, para manifestar su solidaridad a la familia del desaparecido líder partidario.
Aunque se esperaba que el encuentro se realizaría en la misma tarde de ayer, se acordó que se formalizara hoy, lo que finalmente aconteció. "Escuché que la Presidenta les dijo que fue una reunión muy cálida y así fue", señaló Ricardo Alfonsín a las puertas del domicilio del ex jefe de Estado, en declaraciones a la prensa, minutos después de que la jefa de Estado se retirara del lugar.
El candidato a diputado por la UCR bonaerense detalló que la titular del Ejecutivo destacó "el cariño, el afecto y la admiración" que sentía por su padre, y recordó el paso de ella y del líder político por el Senado de la Nación. Precisó que de la reunión participaron él y sus hermanos, pero no su madre, María Lorenza Barrenechea, la cual, dijo, se encuentra transitando por un delicado estado de salud.
Asimismo, explicó que Fernández de Kirchner ya le había anticipado que no hablaría con el periodismo a la salida del domicilio, por considerar que no era adecuado por tratarse de una visita de carácter privado. "Me pidió que yo les avisara", señaló.
"Estuvimos charlando acerca de mi padre, del cariño, el afecto que tenía por él. Nos expresó sus condolencias y nosotros estamos muy agradecidos por su visita, por sus palabras", relató el dirigente radical.
Añadió que, durante la reunión, los participantes se explayaron sobre las "convicciones políticas" de Alfonsín, "de lo que él representaba y que él sostenía que es a través de la política que tenemos que resolver los problemas que padecemos los argentinos". La mandataria, acotó, "dijo que era necesario recuperar los partidos políticos".
El referente de la UCR señaló, además, que la jefa de Estado habló de su viaje reciente a Inglaterra, de su participación en la Cumbre del G-20 y de la "necesidad de reclamar solidaridad a los países" más poderosos para resolver la situación de las naciones más necesitadas.
Ayer, al regreso de su viaje, la primera mandataria se dirigió a la Residencia de Olivos y, a pesar de la expectativa generada por el propio gobierno, se decidió postergar para hoy el encuentro con la familia Alfonsín.
En declaraciones formuladas en Ezeiza, el canciller Jorge Taiana justificó ayer la ausencia de Cristina Fernández en las exequias del caudillo radical: "La presidenta no podía dejar a la Argentina sin la representación de su líder en la quizá la reunión más importante de líderes en los últimos 60 años", indicó.
Agencia DyN