Viernes 03 de Abril de 2009 Edicion impresa pag. 32 > Sociedad
La primera "nocturna" de Roca cumplió sus bodas de oro

ROCA (AR) .- En medio del conflicto docente y sin un edificio propio la primera escuela secundaria nocturna de Roca cumplió 50 años. Las autoridades destacaron sus logros aunque aseguraron que reciben poco apoyo del Consejo Provincial de Educación (CPE).

El CEM Nº 73, ex Escuela Nocturna Nº 3, recordó ayer sus 50 años de vida, y en la ocasión su directora, María Eugenia Venturini, explicó que "no hicimos ninguna ceremonia por el paro, pero tampoco queríamos que esta fecha pasara desapercibida".

Este año la escuela cuenta con 480 alumnos inscriptos aunque en el contexto del conflicto son pocos los estudiantes que comenzaron las clases. "Hay varios docentes de paro y muchos cargos que no se designaron por la interrupción de las asambleas", agregó la directora.

Una de las principales falencias que presenta el colegio es no tener un edificio propio para dictar las clases. "De ser así podríamos tener varios turnos, para que deje de ser una nocturna y sea lo que en realidad es: una escuela para adultos", destacó.

Actualmente funciona en el edificio de la Escuela Nº 32, Isidro Lobo 850, que por la ubicación céntrica es muy demandada no sólo por personas mayores que por temas laborales no pudieron terminar sus estudios, sino también por adolescentes expulsados. De hecho, según Venturini, la mayoría de sus estudiantes son jóvenes entre 16 y 17 años.

"Nuestra escuela está un poco dejada de lado por el CPE", manifestó la directora algo desilusionada.

En este sentido informó que el pedido de instalaciones propias viene desde hace mucho así como también la propuesta de cambiar el plan de estudios, para que esté más orientado a la demanda juvenil. "No se nos tiene en cuenta, ni siquiera tenemos un diseño curricular", agregó.

Durante sus 50 años de enseñanza, la nocturna pasó por varios establecimientos como el del Instituto de Formación Docente y el de la escuela Normal Nº 1 -Villegas y avenida Roca-.

Desde su creación la escuela dio respuesta a aquellos adultos que ante situaciones de crisis no podían terminar de estudiar. "Hoy en este contexto económico y social seguimos enseñando a quienes tuvieron que abandonar el colegio", destacó Venturini.

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