BUENOS AIRES (ABA).- El deceso de Raúl Alfonsín, además de lograr un milagro -después de casi un año la presidenta volvió a dialogar desde Londres con su vicepresidente-, dejó un legado político destinado a la Unión Cívica Radical: en la próxima convención nacional, a realizarse a mediados de abril, con la anuencia de Gerardo Morales, el dirigente que impulsó su expulsión de por vida de la UCR, Julio Cobos, retornará al partido para buscar su recuperación e iniciar el camino para instalarse como candidato en el 2011.
En sus últimos meses, desde su lecho de enfermo en el departamento de la avenida Santa Fe, Alfonsín le pidió a Cobos que apure su vuelta al redil, donde -le anticipó- será recibido con todos los honores.
El mendocino, que encabezó la fuga de los radicales K, prometió obedecer ese mandato, que se plasmará en la inminente convención de Mar del Plata.
Alfonsín reprobó duramente la alianza de Cobos con los Kirchner (ante "Río Negro" lo comparó con Hortensio Quijano, el vice de Juan Domingo Perón en 1946), pero empezó a evaluar de manera muy distinta su comportamiento desde su famoso voto no positivo que, el 17 de julio de 2008, hizo caer la resolución 125 sobre retenciones móviles a las exportaciones de soja.
Volviendo sobre sus pasos, le tendió la mano y conversó con él en su estilo campechano. Uno de los que influyó en ese derrotero fue el ex presidente Eduardo Duhalde, quien por ese entonces habló por teléfono con Alfonsín como un "viejo amigo".
-Doctor, si usted me permite que me meta en la vida de su partido, voy a sacar una declaración apoyando a Cobos, porque se le van a echar encima.
Rápido para descifrar el mensaje, Alfonsín contestó afirmativamente y lo invitó a visitarlo a su departamento al día siguiente, para "tomar una copa de champaña".
A la tertulia se sumó Ricardo, el hijo de Alfonsín. Además de disfrutar la bebida espumante, la "rosca" giró sobre la perspectiva Cobos.
-Estoy pensando en una fórmula para hacerlo volver al partido -lanzó Alfonsín.
-No tiene nada que pensar -intervino Duhalde rápido de reflejos- lo tiene que invitar directamente y hacer que le levantan las sanciones... tiene a mano la figura para recuperar al radicalismo.
-Papá, tiene razón Duhalde -intervino Ricardo-, a cada comité que voy me preguntan por Cobos. Está creciendo mucho.
Alfonsín, con sus defensas físicas bajas, decidió avanzar, pero encontró la firme resistencia del jujeño senador Morales. En sus dos últimos discursos (en la Casa Rosada al descubrirse un busto suyo y en los festejos por los 25 años de democracia), subrayó la importancia del consenso y la unidad como premisas insoslayables, incluso para la oposición y los radicales entre sí.
Postrado, machacó con esos conceptos ante Morales: hay que juntarse, permitir el retorno de todos ¡Abra las puertas!
"Río Negro" pudo saber que Morales, quien ya se mostraba abiertamente con la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, había aflojado y levantado la tranquera para posibilitar que Cobos sea candidato presidencial en el 2011.
Aún desaparecido, Alfonsín sigue marcando el rumbo de la UCR.
