WASHINGTON/NUEVA YORK/PARÍS (DPA).- El jefe del consorcio automotor estadounidense General Motors (GM), Rick Wagoner, renunció a su cargo, según coincidieron ayer reportes periodísticos norteamericanos, en vísperas de que el gobierno de Estados Unidos anuncie un plan de salvataje para empresas del sector. Con su renuncia, Wagoner, de 56 años, despejaría el camino para nuevas ayudas multimillonarias del gobierno estadounidense al consorcio automotor, citó por la noche "Wall Street Journal" a fuentes internas.
Acorde a medios locales, representantes gubernamentales confirmaron que la Casa Blanca condicionó nuevas ayudas estatales a GM a la dimisión de Wagoner.
Hoy, antes de iniciar su primer viaje a Europa como jefe de la Casa Blanca, Barack Obama presentará un nuevo plan de salvataje tanto para GM como para su rival Chrysler.
Se considera seguro que Obama autorice ayudas adicionales en el corto plazo para la supervivencia de las automotrices, pero con la estricta condición de que efectúen otras medidas drásticas de ahorro, algo que el presidente dejó claro hoy en una entrevista de la emisora CBS.
"Queremos una industria automotriz exitosa", dijo y explicó que esto es posible, pero que para ello las empresas tendrán que ser "estilizadas, duras y competitivas". El presidente reconoció que las empresas hacen "serios esfuerzos" para asegurar una supervivencia a largo plazo "pero aún no llegamos del todo al punto".
Tendrán que tomar medidas adicionales, añadió y advirtió que serán necesarias víctimas en todos los frentes, desde los acreedores y sindicatos hasta los consumidores.
El mandatario no dio detalles sobre el plan que será anunciado hoy. Según información de prensa basada en fuentes de la comisión automotriz conformada por Obama, el gobierno dejará en claro que a pesar de que se darán más ayudas, quedará fuera de toda posibilidad la declaración de insolvencia de ambas empresas. En este marco, se les concederá a las automotrices un nuevo plazo de gracia para que resuelvan cuestiones pendientes con acreedores y sindicatos, añadió. GM y Chrysler tienen plazo hasta el martes para la presentación de sus respectivos planes de reestructuración. Hasta ahora ninguna de las dos empresas pudo aunar a sindicatos y acreedores tras el cumplimiento de las condiciones planteadas por el gobierno. Se prevé que Obama otorgará a estas automotrices tiempo extra para lograr este objetivo. De todas formas, según la información extraoficial de la comisión, se trata de semanas y no de meses.