SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El concejal del ARI, Darío Duch, anticipó que impulsará una revisión normativa para imponer "transparencia" en los mecanismos la compra y adjudicación de tierras sociales destinadas a la solución de la emergencia habitacional.
El planteo es la primera respuesta a la polémica desatada por la adjudicación en venta de 5 hectáreas de "tierras sociales" al SOYEM que el intendente Marcelo Cascón resolvió sin una evaluación técnico-social y desoyendo los criterios planteados por el Consejo Social de Tierras.
El mandatario justificó el compromiso de venta acordado con el sindicato en la necesidad de "garantizar un ciclo virtuoso del recupero y la capitalización" de inmuebles que aporta el municipio al banco de Tierras que, a su entender, "es más fácil que se produzca con las organizaciones" cooperativas o gremiales. Cascón descartó cualquier vinculación con la negociación de la emergencia económica que se encaminó el viernes con el anunció de acompañamiento del SOYEM.
Duch, cuestionó al Ejecutivo por aplicar un "criterio de caja" para distribuir las tierras sociales que "deberá pagar toda la comunidad con sangre, sudor y lágrimas", y advirtió que "rifar las 35 hectáreas con este tipo de experiencias nos va a dejar sin tierras en dos meses".
El edil recordó que "las prioridades tienen que ser definidas por el Consejo de Tierras, no pueden convertirse en la facultad del príncipe" y sostuvo que "de no mediar "un criterio de transparencia los más poderosos se van a quedar con las 35 hectáreas".
El SOYEM fue priorizado sobre los 600 inscriptos en el registro de Demandantes, las 2 cooperativas y las 8 en formación que iniciaron gestiones ante el Instituto de la Viviendas para acceder a una solución habitacional.
A la par del acuerdo cerrado con los municipales el Ejecutivo tiene próxima a la firma otra acta intención similar con Unter local y ya suscribió convenios para la autoconstrucción de viviendas con las cooperativas conformadas por los ocupantes de las 120 viviendas, que se canalizarán dentro de programas de Nación pero sin un espacio físico todavía.
Lo que causó más escozor en la opinión pública es que el SOYEM todavía no rindió cuentas de lo que hizo con el producido del terreno que le cedió el municipio en los años 70 para la construcción de viviendas a sus afiliados.