WASHINGTON (AFP) - Los directores de varios grandes grupos bancarios estadounidenses se comprometieron ayer en Washington a trabajar con el presidente Barack Obama, en momentos en que el Estado intenta reactivar una economía y un sistema financiero en crisis.

Los banqueros se reunieron en la Casa Blanca para discutir el plan de la administración para que las instituciones financieras se deshagan de sus activos invendibles por medio de una asociación entre el sector público y el privado. "No conocemos todos los detalles, pero pensamos que es realmente un primer paso interesante", declaró luego de la reunión el director general del Bank of New York Mellon, Bob Kelly.

Durante el encuentro también hablaron, según rl portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, de las medidas anunciadas por el secretario del Tesoro Timothy Geithner para un control más estricto de las empresas financieras y también de los esfuerzos para volver a poner en funcionamiento los mercados financieros.

Además conversaron sobre el mercado inmobiliario y la cuestión de los sueldos y bonos cobrados por gerentes.

Por su parte el director gerente de Wells Fargo John Stumpf estimó que la propuesta de Obama "muy alentadora" para poner nuevamente la economía en el camino del crecimiento. "El objetivo es trabajar juntos", agregó.

Obama "fue totalmente claro sobre la idea de que no está contra la riqueza" declaró luego el presidente ejecutivo del JPMorgan Chase, Jamie Dimon a la cadena CNBC.

En relación al proyecto parlamentario de gravar hasta en 90% las primas de los ejecutivos de firmas rescatadas por el Estado, Dimon subrayó que hay "muchas cosas a determinar todavía" y que no se "dijo la última palabra al respecto".

Mientras tanto, los principales mercados bursátiles internacionales finalizaron ayer con mayoría de bajas, en una toma de ganancias de los inversores y debido a la baja en los precios del petróleo.

La Bolsa de Nueva York terminó en neta baja , ante la decisión de los operadores de capitalizar sus beneficios al término de una semana de ganancias importantes: el Dow Jones perdió 1,87% y el Nasdaq 2,63%. El mercado registró tomas de beneficios, de manera bastante "natural" y "sana", indicó Owen Fitzpatrick, del Deutsche Bank.

La recuperación del dólar y la desaceleración global hicieron perder casi 2 dólares al crudo, hasta 52,38 unidades el barril en Texas. En Europa, el índice británico FTSE 100 perdió 0,8%; el indicador alemán DAX bajó 1,4%, mientras que el índice francés CAC-40 retrocedió 1,8%. En Japón, el Nikkei bajó 0,11%.