Jueves 26 de Marzo de 2009 Edicion impresa pag. 34 > Policiales y Judiciales
Un juez tiroteó y puso en fuga a delincuentes
Fue el magistrado Baños, quien tuvo la causa del robo de las manos de Perón. Actuó junto a los custodios que lo acompañaban a su casa. No hubo heridos.

BUENOS AIRES (DyN).- El juez de instrucción porteño Alberto Julio Baños y su custodia, se enfrentaron a tiros y pusieron en fuga a dos supuestos ladrones que habían ingresado al jardín de la casa del magistrado en el partido bonaerense de Almirante Brown, informaron ayer fuentes policiales.

Los voceros indicaron que tanto el juez como su esposa y los custodios resultaron ilesos, al igual que los delincuentes, que lograron escapar.

El hecho ocurrió antenoche alrededor de las 22, cuando Baños y su esposa llegaban a su casa de la calle 30 de Septiembre 558, acompañados de dos custodios de la Policía Federal, a bordo de un automóvil policial Ford Taurus sin identificación.

Según las fuentes consultadas, el magistrado y su esposa entraron a la vivienda acompañados por uno de los custodios, un sargento de la división Fraudes Bancarios, mientras el otro -un agente que se desempeña en Robos y Hurtos- quedó en el auto. Una vez en el interior, el custodio advirtió la presencia de dos siluetas en el parque de la casa, por lo que dio la voz de alto. Los desconocidos abrieron fuego contra el policía, quien repelió el ataque. Así se inició un enfrentamiento en el que también efectuó disparos el magistrado, según confirmaron las fuentes. Los dos intrusos lograron finalmente escapar tras saltar el paredón de la vivienda que da hacia un terreno contiguo.

Cuando se escucharon los primeros disparos, una persona que se encontraba en la puerta de la casa comenzó a correr cubriendo su huida con disparos, por lo que fue seguido por el agente que se hallaba en el auto, generándose un segundo enfrentamiento que terminó cuando el desconocido se dio a la fuga y se perdió de vista a la altura de las vías del ferrocarril Roca, situada a metros de la vivienda, en el límite entre Adrogué y Llavallol.

Las fuentes consultadas precisaron que al momento de ocurrir el hecho se encontraba dentro de la vivienda un tercer agente perteneciente a la División Custodia y Traslado de la Bonaerense que no se percató de la situación ya que habría estado en el baño.

Los intrusos tenían entre 20 y 25 años, mientras los investigadores secuestraron en el lugar al menos cinco vainas de pistola calibre 11:25 correspondientes a las pistolas usadas por los delincuentes, al tiempo que se incautaron de las armas usadas por el juez y los dos custodios para ser sometidas a las pericias.

Según las primeras pericias, los accesos a la vivienda del magistrado no fueron violentados, por lo que se presume que los sospechosos habrían saltado un paredón. Lo ocurrido fue denunciado en la comisaría Primera de Almirante Brown donde se instruyeron actuaciones por "tentativa de robo calificado por el uso de arma de fuego, y atentado y resistencia a la autoridad", con intervención de la Unidad Fiscal de Instrucción (UFI) 20, correspondiente a casos de autores ignorados, a cargo de Carlos Arocena.

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