MÉXICO (AP).- La secretaria de Estado Hillary Clinton aseguró que Estados Unidos comparte la responsabilidad con México para enfrentar a los carteles de las drogas que han incrementado su nivel de violencia. A su llegada a México para una visita de dos días, la funcionaria dijo que la "insaciable´´ demanda de drogas en su país y la incapacidad de detener el tráfico de armas hacia México están detrás de la creciente violencia en la frontera común.
Clinton habló con reporteros que viajaron con ella a México, donde se reunirá con el presidente Felipe Calderón y la canciller Patricia Espinosa para abordar la cooperación antidrogas. "Nuestra insaciable demanda de drogas ilegales alimenta el tráfico de drogas´´, señaló. Añadió que "nuestra incapacidad para prevenir que armas sean ilegalmente traficadas a través de la frontera para armar a estos criminales, causa las muertes de policías, soldados y civiles´´. Y aseguró que "siento rotundamente que tenemos una corresponsabilidad´´ en la lucha que México libra contra las organizaciones de narcotraficantes. Las declaraciones de la funcionaria representan las más enfáticas del gobierno de Estados Unidos en admitir que ese país comparte la responsabilidad sobre la situación.
"Estos criminales han superado a los oficiales de la ley´´, señaló en referencia a las armas y el equipo militar, como artefactos de visión nocturna y blindaje que los carteles introducen a México desde Estados Unidos. "Claramente, lo que hemos estado haciendo no funciona y es injusto que nuestra incapacidad... crea una situación por la cual la gente considera responsables al gobierno y el pueblo mexicanos. Eso no es justo´´, manifestó.
Clinton, en su primer viaje a un país latinoamericano en el cargo, llegó a México para afinar detalles del viaje del presidente Barack Obama a México a mediados de abril. La gira de la secretaria de Estado ocurre un día después de que Obama reforzara su frontera con México para contener la expansión de la violencia de los carteles a su territorio. Las autoridades mexicanas han señalado que el combate al narcotráfico es un asunto de corresponsabilidad en la que los dos países deben hacer su parte. Calderón ha pedido a EE.UU. un mayor esfuerzo en el combate a la corrupción en su territorio, el tráfico de armas y el lavado de dinero.