WASHINGTON (AFP) - El gobierno estadounidense quiere que el Congreso actúe con premura en la elaboración de un proyecto de ley que otorgue al ejecutivo amplios poderes para intervenir las firmas financieras cuya bancarrota pueda poner en peligro la economía estadounidense.
El secretario del Tesoro estadounidense Timothy Geithner afirmó que su reforma de la regulación prevé "limitar la toma de riesgos" en las grandes sociedades financieras, amenazando así las bases del éxito de estrellas de Wall Street, como Goldman Sachs y Morgan Stanley.
"Nuestro plan dará al gobierno los medios para limitar la toma de riesgos en las empresas que puedan ocasionar daños en serie" en el sistema, declaró Geithner, en un discurso pronunciado en Nueva York. "Una vez que hayamos salido de esta crisis", se ajustarán fuertemente "las normas (...) que nuestras empresas financieras más grandes y las más interrelacionadas deberán respetar", agregó. Como muchos otros, Geithner estima que los grandes bancos de Wall Street tienen una gran responsabilidad en la actual crisis a causa de haber perdido toda noción de riesgo y sus consecuencias.
"Dejamos que nuestro sistema financiero tomara riesgos irresponsables", subrayó. "Esas decisiones causaron sufrimientos enormes y las víctimas fueron en gran parte estadounidenses comunes y los pequeños empresarios, que eran prudentes y responsables. Es básicamente injusto, y los estadounidenses están -con razón- encolerizados y exasperados", agregó. Geithner no dijo mucho más sobre las restricciones que planea imponer a los bancos. Simplemente señaló que como "el riesgo no conoce fronteras", el Tesoro pondrá énfasis en la cooperación internacional para definir "normas más estrictas a escala planetaria".
Geithner debe presentar hoy ante la Cámara de Representantes las líneas generales de su proyecto de ajuste de la reglamentación, al que el gobierno del presidente Barack Obama otorga prioridad.
El Tesoro indicó que la semana próxima se presentará al Congreso un proyecto de ley, del cual publicó algunos items, sobre la creación de una autoridad regulatoria con atribuciones para administrar o desmantelar empresas cuya eventual quiebra implicaría una amenaza para el sistema financiero. Geithner había abogado el martes por la creación de una estructura de ese tipo, a fin de solucionar más fácilmente los problemas presentados por AIG, la aseguradora salvada de la quiebra a un costo de más de 170.000 millones de dólares por las autoridades estadounidenses.
Según el documento del Tesoro, esta autoridad supervisará "las instituciones financieras que potencialmente impliquen un riesgo ´sistémico´", no controladas por la Comisión aseguradora de depósitos bancarios (FDIC). Entre ellas "holdings bancarios, y holdings que controlen las casas de corretajes, compañías de seguros y operadores de los mercados de futuros", agrega el texto.