VILLA REGINA (AVR).- Los intendentes del Alto Valle se reunieron ayer en Regina para delinear en conjunto una serie de medidas que permitan afrontar la crisis económica.
Garantizar la fuente laboral a los empleados municipales, sostener los servicios públicos, y generar obras públicas serán los objetivos prioritarios.
El encuentro que fue convocado por el jefe comunal reginense, Luis Albrieu, contó con la presencia de los intendentes Carlos Soria, de Roca; Patricia Etcheverry, de Cinco Saltos; José Rivas, de Chichinales; Juan Domingo Garrone, de General Enrique Godoy; Leonardo Ballester, de Ingeniero Huergo y Miguel Petricio de Mainqué.
"Hoy contamos con la participación de la intendenta de Cinco Saltos, que viene en representación de los municipios de la zona de Confluencia, donde ya se hizo un análisis similar", destacó el intendente reginense. Agregó que "como intendentes y responsables de un gobierno debemos denunciar la situación de crisis, debemos comenzar a charlar distintas alternativas por la crisis en la que estamos sumergidos, y que seguramente se va a profundizar y no sabemos qué duración va a tener".
"Para dejar en claro, en términos nominales la coparticipación a los municipios ha bajado en un 13%, pero si sumamos la inflación de un año a otro, la coparticipación en términos reales ha bajado entre el 25 y el 30%, con lo cual nos obliga a hacer medidas de ajuste", describió Albrieu.
En cuanto a las medidas, comentó que "continuaremos con el intercambio de ideas para ver cómo podemos acortar la crisis y que llegue lo menos posible al vecino y empleados municipales. Sabemos que este año las cuestiones sociales se van a agudizar y se deberá aumentar la ayuda a servicios que no dependen del Estado municipal, como ser salud, seguridad y educación".
Entre las prioridades se acordó en primer lugar asegurar el pago de los salarios, mantener las fuentes de trabajo y que los ajustes no pasen por el personal contratado, y mantener los servicios esenciales.
Finalmente se señaló que se espera que la provincia coparticipe el 30% de los ingresos a la provincia por las retenciones a la soja, que se invertirá en obras públicas para generar fuentes laborales.
