Madres. Hijas. Hermanas. Amigas. Casi todas las mujeres padecieron alguna vez los síntomas de lo que llaman síndrome premenstrual, que se presentan durante los días previos a la menstruación en forma de dolor de cabeza, hinchazón, irritabilidad, depresión, ansiedad y antojos de comida, entre otros síntomas. Es común, además, que producto de una sociedad culturalmente machista las mujeres deban soportar la ya tan trillada frase: "Está histérica porque le debe haber venido". Lo cierto es que este conglomerado de signos afectan no sólo físicamente a millones de mujeres sino que a muchas de ellas las desequilibra emocionalmente.

Estos síntomas relacionados con el ciclo menstrual se producen en la semana o las dos semanas anteriores a la menstruación, y suelen desaparecer cuando comienza el período menstrual.

En su vida, las mujeres sufren estos síntomas frecuentemente, ocupando en muchos casos seis o más días por ciclo. Según estimaciones, si se contabilizaran los días afectados por causa de estos síntomas, podría decirse que una mujer padece estos síntomas aproximadamente entre 7 y 8 años de su vida activa.

"Con el paso de los años el síndrome premenstrual ha sido reconocido como un problema que afecta a la mujer en los aspectos familiares, laborales y sociales, pudiendo variar según cada caso en particular, pero impactando notablemente en la calidad de vida", afirma la presidenta del Centro Latinoamericano Salud y Mujer (Celsam), Diana Galimberti. Según la médica, muchas veces se forman estereotipos o rótulos para las mujeres cuando atraviesan este ciclo. "Es común que se las tilde de ´histéricas´, lo cual dificulta el acceso a la consulta y a los servicios de salud", afirma la médica.

Fluctuaciones hormonales

Si bien las causas aún están siendo investigadas, los especialistas reconocen que las fluctuaciones hormonales a lo largo del ciclo menstrual presentan un rol determinante en la génesis de este síndrome.

De acuerdo a estadísticas latinoamericanas, un 96% de las mujeres en México y Brasil padecen de al menos un síntoma molesto antes de la menstruación, y alrededor del 46% lo sufre de forma constante.

Un estudio comparativo realizado en más de 4.000 mujeres latinoamericanas y europeas en edad reproductiva mostró además que las mujeres latinoamericanas manifiestan mayor prevalencia en comparación con las mujeres europeas (46.9% en Latinoamérica vs. 33.1% en Europa). Según explica Enrique Lastreto, profesor adjunto de Ginecología de la universidad nacional de Córdoba, el síndrome premenstrual se ubica en la segunda fase del ciclo, es decir, 6 días antes de la menstruación, aunque puede presentarse incluso entre 13 o14 días previos a su llegada. Entre los síntomas físicos se encuentran los cólicos, el dolor, el aumento de la sensibilidad mamaria, la distensión abdominal y los edemas en las extremidades. Entre los psicológicos se hallan: la depresión, el llanto fácil, la dificultad para concentrarse y la fatiga.

Hay casos graves, que rondan entre un 2 y un 5%, en donde se presenta el trastorno disfórico premenstrual: "Suelen ser casos en los que las mujeres consultaron antes al psiquiatra. Estas son las mujeres que en días previos entran en cuadros de depresión serios e ideas suicidas. También se pueden evidenciar ataques de pánico e insomnio", indica.

"Los médicos hemos contribuido a que las mujeres crean que tienen que aguantar estos síntomas, dándoles analgésicos -critica Lastreto-. Hay que hacerles entender que esto ahora tiene solución y que ella no tienen por qué padecer."

Cómo controlar

los dolores

Muchas mujeres asumen los síntomas del síndrome premenstrual como algo natural y esperan a que se les pasen. Hay, sin embargo, formas de alivio.

? Mantener una correcta alimentación: es recomendable seguir una dieta diaria baja en sal, cafeína, carbohidratos, azúcares y moderar el consumo de alcohol.

? Actividad física: en general es beneficiosa para la salud porque puede aliviar la sensación de tensión, ansiedad y contribuye a reducir la retención de líquido.

? Relajación: escuchar música, por ejemplo, puede mejorar el humor y el estado de ánimo, disminuir ansiedades y estimular la creatividad.

? Dentro de los tratamientos farmacológicos hay analgésicos, algunos psicofármacos y anticonceptivos orales especiales (en las mujeres que requieran anticoncepción). Es importante consultar con el médico ginecólogo.