La Cámara de Senadores debatirá mañana el proyecto oficial de adelanto de la fecha de las elecciones parlamentarias, una iniciativa de gran valor para el gobierno nacional que cuenta con el apoyo mayoritario del bloque oficialista y senadores aliados.
Las posibilidades de bloque kirchneristas, que contaban con 40 adherentes para enfrentar la votación, se vieron fortalecidas hoy con el apoyo de los dos legisladores del ARI de Tierra del Fuego, José Martínez y María Rosa Díaz, quienes anunciaron que coinciden con el argumento oficial para anticipar en cuatro meses los comicios parlamentarios.
Los comicios renovarán la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado. El sorpresivo anuncio de los patagónicos, a quienes el propio oficialismo no contaba entre sus votos, representa un respaldo importante de última hora, que le da un carácter virtualmente inalcanzable para la oposición.
La iniciativa oficial tuvo una rápida ejecución en el Congreso, luego que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció el adelanto electoral durante un acto en la provincia de Chubut el viernes 13 de marzo, envió la iniciativa a Diputados el lunes 16, fue aprobado por la Cámara el miércoles 18 y un día después fue firmado por una mayoría de la comisión de Asuntos Constitucionales del Senado.
La parte sustancial del proyecto en debate será la suspensión de un artículo del Código Electoral, aprobado a pedido del gobierno que lideraba el presidente Néstor Kirchner en 2004, que fijaba la fecha de las elecciones en el cuarto domingo de octubre y su reemplazo "por única vez" por la fecha del 28 de junio. L
a iniciativa argumenta que "en el orden internacional han estallado los mercados financieros, desatando una crisis cuya intensidad, extensión y profundidad todavía no se conocen datos", por lo que "la realidad de esa crítica situación hace desaconsejable la extensión de las campañas electorales desde inicios de marzo hasta el cuarto domingo del mes de octubre".
También sostiene que la propuesta apunta a "evitar los inconvenientes y los cuantiosos gastos que provocarían las múltiples celebraciones de actos electorales convocados en fechas diferentes".
El oficialismo argumentará durante el debate que la votación anticipada facilitará la gobernabilidad del país en el segundo semestre del año, cuando se espera que impacte de lleno las consecuencias de la crisis financiera internacional, en tanto los opositores intentarán convencer que el gobierno sólo busca ganar tiempo para eludir una derrota electoral que podría ser peor si se degradan los indicadores económicos.
La oposición, a su vez, confrontará el mensaje optimista del oficialismo con críticas a la falta de transparencia en las elecciones de 2007, propondrá la aprobación de la boleta única de candidatos y un cambio drástico de modelo económico.
Mientras tanto, los voceros del bloque oficialista dieron por seguro que el kirchnerismo contará con 39 adherentes propios de la bancada oficial, más el apoyo de los fueguinos y el compromiso del representante del Movimiento Popular Neuquino, Horacio Lores.
Para la oposición, las cuentas no son tan claras y hablan de "una votación ajustada", mientras descreen de las cifras de sus adversarios y buscan ampliar las propias, que inicialmente parecen haberse estabilizado en 29.
Contabilizan el respaldo 10 legisladores de la Unión Cívica Radical, tres más del interbloque de ex radicales K, los dos senadores de la Coalición Cívica porteña y un socialista santafesino. También dos justicialistas disidentes de San Luis, dos de Santa Fe, otros dos de Salta, más una bonaerense, un sanjuanino, un riojano, así como dos bussistas tucumanos, un cordobés juecista y un renovador salteño.
Agencia DyN