El papa Benedicto XVI hizo una última petición el lunes al final de su peregrinaje por Africa, urgiendo más solidaridad entre las naciones y continentes para que los recursos de la Tierra sean compartidos de manera más equitativa con los pobres del mundo.
Durante todo su viaje, Benedicto XVI mantuvo el mensaje de la cristiandad como un medio para inspirar esperanza en la angustiosamente pobre gente de la región. Sin embargo, su rechazo al uso de condones para ayudar a Africa a combatir la epidemia de sida provocó una tormenta de críticas.
De cualquier manera, sus feligreses en Africa _el continente que más sufre por la enfermedad_ recibieron al pontífice con júbilo y amor, acudiendo a verlo por cientos de miles, incluso clérigos y personas comunes que creen que se deben utilizar condones para salvar vidas.
En su discurso de despedida en el aeropuerto de Luanda, el pontífice también urgió a los líderes de Angola a hacer de ``las aspiraciones fundamentales de la gente más necesitada'' su principal preocupación. ``Nuestros corazones no pueden estar en paz mientras haya hermanos que sufren la falta de comida, trabajo, una casa y otros bienes fundamentales'', subrayó el Papa de 81 años en medio de un calor abrasador y bajo un pabellón cerca del jet rentado de Alitalia que lo llevaría más tarde de regreso a Roma.
Benedicto XVI también dio la bendición al pueblo de Angola al final de un peregrinaje africano de siete días, su primero al continente como pontífice. Visitó Camerún y Angola, países con una población católica grande. Durante su visita el Papa habló explícita y fuertemente contra la corrupción, pidiendo que los pobres de Africa no sean olvidados.
Tanto Angola como Camerún son naciones ricas en recursos, incluido petróleo. Sin embargo, los obispos locales acusan a sus regímenes autoritarios de utilizar esos recursos para enriquecer a una elite pequeña mientras la inmensa mayoría permanece en la pobreza.
Ambos países tienen presidentes católicos. Si el mandatario angoleño Eduardo dos Santos sintió alguna crítica en las palabras del Papa, no lo mostró el lunes.
En el aeropuerto, dos Santos afirmó que el pueblo de Angola estaba agradecida por ``el amor que siempre recibe del Vaticano, el cual nos proporciona fortaleza y nos ayuda a promover la democracia y justicia''. ``Estamos muy contentos de haber tenido la oportunidad de darle la bienvenida a nuestro país y estamos muy agradecidos por todo el consejo que ha dado a nuestro pueblo'', afirmó.
AP