Independiente ya metió una gran campaña, pero está "en el baile" y ahora quiere bailar. Esta noche visitará a Boca e intentará robarle la localía, en uno de los cuatro cruces por los octavos de final de la Liga Nacional de básquet. El encuentro se pondrá en marcha a las 21, en la "Bombonerita" de Capital Federal y será arbitrado por Daniel Rodrigo-Jorge Chávez.
El plantel neuquino entrenó anoche el reducto de los "Xeneizes" y Jervaughn Scales trabajó con normalidad. Así, Mauricio Santángelo recuperará una pieza clave, que fue muy regular durante toda la competencia.
Con el interno, más los sorprendentes Cedric Moodie y Brice Assie, el "Rojo" cambió rápidamente de planes: se olvidó del descenso y empezó a pensar en pelear arriba. De hecho, durante gran parte del torneo se mantuvo entre los cuatro de arriba y muchos pensaron que hasta podía llegar a ser uno "top 4" que están en pleno descanso.
Sin embargo, el quinteto neuquino tuvo un bajón en el cierre de la segunda fase, cayó hasta el noveno lugar y por esto no tendrá la localía ante Boca.
Precisamente, el equipo porteño mejoró su nivel a partir de la llegada del técnico Fernando Duró y con el cambio de Derrick Alston por Mark Bortz. Además, subió mucho su nivel Juan Espil, quien se convirtió en su principal arma ofensiva.
El pivote Fernando Calvi señaló a LNB.com.ar que "tener la ventaja de cancha ya nos hace tener un mayor optimismo. Tendremos una linda serie ante Independiente, que nos ganó tres veces esta temporada. Siempre nos costó jugar contra ellos. Tienen extranjeros muy fuertes y deberemos estar firmes en defensa para poder ganar. La gente de Boca terminó entusiasmada con el equipo, así que esperamos que nos acompañe".
En las veces que se midieron el "Rojo" tiene una ventaja de 12-11, la que consiguió esta temporada con sus tres victorias contra una del "Xeneize". Independiente ganó las dos veces en Buenos Aires (94-87 y 77-75), además de una victoria como local (94-78). Y Boca ganó en Neuquén, en el partido más reciente, por 96-90.