NEUQUÉN (AN).- Tres delincuentes ingresaron de madrugada a la sucursal del supermercado Topsy en calle Brown y tras reducir al empleado lo encerraron dentro de un horno de panificación que se encontraba apagado pero mantenía 50 grados de temperatura. El joven se encuentra fuera de peligro aunque padeció un cuadro de deshidratación y desesperación. Los ladrones se llevaron 1.500 pesos.
El hecho ocurrió alrededor de las 4 de la madrugada de ayer en el supermercado ubicado en Brown 150 y según explicó la víctima a la policía, los tres sujetos habrían ingresado al local por una ventana que da al sector de estacionamiento.
El joven trabajador, de unos 20 años, se encontraba en el depósito ya que durante la noche se encarga de reponer las góndolas y acomodarlas entre otras labores.
Los delincuentes lo sorprendieron justo en dicho sector donde lo encañonaron con una pistola 9 milímetros, lo obligan a mantener la cabeza gacha y le exigieron dinero.
A golpes lo llevaron hasta la planta alta donde se encuentra el sector de panificación y algunas oficinas.
La golpiza concluyó cuando los ladrones, en un acto de pura crueldad, resolvieron meterlo dentro de un horno que si bien se encontraba apagado desde las 21 todavía mantenía una temperatura de 50 grados, según confiaron fuentes policiales.
Los tres sujetos aprovecharon a sacar de la caja chica del local alrededor de 1.500 pesos, destinados a abastecer de cambio a las cajas.
Los delincuentes revolvieron todo el local y los vestidores antes de fugarse del lugar.
El repositor permaneció dentro del horno hasta las 6:30 de la mañana, cuando lo encontró el segundo encargado del local. "Al muchacho lo sacaron del horno consciente pero con principio de deshidratación y descompensado por falta de oxigeno. Ni bien salió se puso a llorar desesperado", relató uno de los pesquisas.
De inmediato lo trasladaron al hospital Castro Rendón donde se lo compensó. Alrededor de las 9 los profesionales le dieron el alta.
Durante las pericias llevadas a cabo por personal de la comisaría Primera se lograron levantar rastros y se cuenta con la descripción del rostro del sujeto que encerró al empleado en el horno. "Se hará un reconocimiento fotográfico para tratar de determinar si es un delincuente conocido", explicaron desde la policía.
En el supermercado los empleados se mostraron solidarios con el compañero. Trascendió que sospechan que los estuvieron observando porque los ladrones sabían que la firma no tiene seguridad nocturna.