NEUQUÉN (AN).- Si el gobierno pudiera resolver el conflicto de los docentes, no le alcanzaría para garantizar las clases en toda la provincia: los auxiliares de servicio del gremio ATE extendieron ayer su medida de fuerza hasta el miércoles próximo.

Así lo anunciaron, en medio de su reclamo de la apertura de una paritaria para el personal, la continuación de pases a planta, y la entrega de ropa de trabajo.

En rigor, se trata de un conflicto originado en un acta acuerdo que la subsecretaría de Educación, Patricia Ruiz, firmó con ellos a fines del ciclo lectivo 2008.

Allí se comprometía a dar una respuesta concreta a estos reclamos. ATE dice ahora que el acuerdo no fue cumplido. Y por eso lanzó su nuevo plan de lucha.

Ayer la policía neuquina fue al Consejo Provincial de Educación para garantizar el ingreso del personal no perteneciente al sindicato.

Durante los últimos días ATE había bloqueado los accesos. El dirigente Jorge Marillán dijo que la policía "fue a prepotear a los trabajadores" que iban a realizar el reclamo.

Sostuvo que mientras no "se cumpla con el acuerdo" el "paro seguirá endureciéndose, y no va a haber clases hasta que nos den una respuesta".

La tarea de los auxiliares es vital para el funcionamiento de los establecimientos.

Son los encargados, entre otras cosas, de la limpieza y mantenimiento de las escuelas.

También ATEN incluye en su reclamo salarial a los porteros que tiene entre sus filas. Por lo que este conflicto no sólo incluye la protesta encabezada por el gremio estatal.