CIPOLLETTI (AC).- "El cuadro probatorio, por el momento, es suficiente para sospechar que (Ciro) Gutiérrez fue el autor del disparo que hirió a (Leonel Patricio) Morales y del que dio muerte a (Andrés) Millahual. Los argumentos defensistas no tienen fuerza suficiente para refutar los razonamientos que llevaron a concluir su provisoria culpabilidad", consideraron ayer los jueces de la Cámara Segunda del Crimen al confirmar el procesamiento y prisión preventiva del detenido.
Gutiérrez (20) deberá permanecer en la cárcel hasta que se realice el juicio oral en el que se analizarán las pruebas colectadas hasta el momento y otras que fueron solicitadas para determinar su responsabilidad o no (como insiste la defensa) en el hecho que ocurrió el 8 de febrero de este año, en las 200 Viviendas de Cipolletti.
Por ahora los jueces Pablo Repetto, César Elcarás y Guillermo Baquero Lazcano avalaron la hipótesis de que el 8 de febrero, a las 8.25 de la mañana en la entrada 19 del Barrio 200 Viviendas, Gutiérrez "golpeó con un arma de fuego" en la cabeza a Morales, a quien luego "le disparó en el abdomen".
Intervino Millahual "y recibió de Gutiérrez un disparo en la región retroauricular que le produjo la muerte. Luego Gutiérrez huyó del lugar y al ser sorprendido por policías, se dio a la fuga hasta que fue aprehendido".
El defensor Juan Manuel Kees, al fundamentar la apelación al procesamiento, hizo hincapié entre otros argumentos, en las "contradicciones" de un testigo que peleó con Gutiérrez, además de la pericia que determinó que su cliente no tenía pólvora en sus manos. Sí le dio positiva esta prueba a Morales, el joven que resultó herido.
"La pólvora en las manos de Morales -que recibió un disparo- puede significar que intentó defenderse o bien que disparó un arma en ese momento, o bien que disparó un arma de fuego en otro momento. Por supuesto que Morales -presente en ese instante- ahondará en detalles a la hora del juicio. Luego, que Gutiérrez no haya tenido pólvora en sus manos a la hora que le tomaron la muestra es un indicio que no aporta certeza negativa (dado el posible uso de guantes del motociclista o un lavado previo)", remarcaron los jueces.
"Estimamos que el descargo ensayado por el inculpado poco aporta -a pesar del apoyo de su asistencia técnica- en orden a controvertir la hipótesis de cargo elaborada por la magistrada de instrucción que, exhibiéndose razonable y ajustada a las pruebas relevantes del suceso investigado, merece ser homologada en cuanto ha sido materia de agravios, dado la consistencia del cuadro cargoso reseñado", señalaron finalmente los magistrados.