En el día después de detener al mundo futbolístico con su segundo renuncia al seleccionado argentino, Juan Román Riquelme recibió numerosas muestras de apoyo de los hinchas de Boca.

Un grupo de simpatizantes colgó banderas en la práctica de ayer en Casa Amarilla (ver página 37) que expresaron su amor por el actual 10 del club: "Volvé Román. D10s no existe", rezó una de ellas, mientras otra con los colores de la Argentina, decía metafóricamente: "Perdónalos Román, no saben lo que hacen".

En la tribuna se instalaron cerca de un centenar de hinchas para observar el entrenamiento del equipo, mientras decenas de medios de comunicación no se perdieron ni siquiera un movimiento del "Torero".

Riquelme pegó su segundo portazo en la y no ahorró críticas para Maradona. "La selección se terminó para mí. La realidad es que con el técnico no coincidimos mucho, mis códigos no son los de él y nosotros dos está claro que no podemos trabajar juntos", dijo entre otras cosas.

Según expresaron sus allegados, desde que dimitió en el seleccionado, Román "recibió numerosos llamados telefónicos de adhesión", más el de la gente.

Inclusive, mientras el enganche se entrenaba, un colaborador suyo tenía su celular y permanentemente ingresaban mensajes de textos de jugadores y hasta algunos directores técnicos que deseaban hablarle.

Ya en la cancha principal del complejo, Riquelme se entrenó a la par de sus compañeros y hasta participó un mini partido de fútbol en espacios reducidos, que tuvo como árbitro a Carlos Ischia.

En el transcurso de ese mini partido convirtió un gol, dio asistencias para Palermo y se movió sin ningún tipo de problemas, mientras a la distancia la gente observaba sus movimientos y las cámaras de televisión seguían sus pasos "minuto a minuto".

Cuando finalizó el entrenamiento, Riquelme, acompañado por su amigo Hugo Ibarra y el kinesiólogo de Boca, Leonardo Betchakian, se dirigió hacia los vestuarios, pero antes saludó con un "hola a todos, buen día", firmó algunos autógrafos y se introdujo en el edificio principal del predio.

Ya en su interior, luego de mantener una larga charla con el mánager del club, Carlos Bianchi, se retiró a bordo de su vehículo sin formular declaraciones.

Ischia y los demás jugadores adoptaron la misma postura. Y aunque el DT no confirmó el equipo, es casi un hecho que ante Argentinos, Román irá de arranque.