SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El número de pasajeros en el transporte urbano registró una fuerte caída en esta ciudad y pone en suspenso el eventual aumento del boleto, que hasta no hace mucho las empresas prestadoras consideraban indispensable para atender sus mayores costos.

El último ajuste data de setiembre último, cuando el boleto mínimo quedó fijado en 1,60 pesos. Una ordenanza obliga a efectuar revisiones con frecuencia semestral. El argumento de las empresas Codao y Tres de Mayo es que el precio del pasaje acumula un fuerte atraso, pero admiten que el cuadro de situación cambió mucho en las últimas semanas, al punto de que un retoque podría agravar de manera estrepitosa la reducción pasajeros.

La alternativas en estudio pasarían entonces por mantener el boleto actual pero incorporar ingresos por otras vías como la publicidad o las exenciones impositivas.

En cualquier caso, la decisión deberá ser "política" y pasará previamente por un análisis puntilloso de los costos empresarios, algo en lo que es difícil que las partes lleguen a un acuerdo ya que en setiembre pasado el municipio determinó que el sistema "cerraba" con el boleto a 1,60 pero las empresas sostenían que el límite de "equilibrio" no podía ser inferior a 1,75. Con ese antecedente, es probable que lleven a la mesa de negociación (el viernes será la próxima reunión entre las partes) un número no inferior a 1,80, lo que significaría un aumento del 12,5%.

El representante de Tres de Mayo, Manuel Carrasco, no quiso brindar ninguna precisión sobre el cuadro tarifario que consideran conveniente. Sólo refirió que "el boleto tiene un precio técnico y deberá tener otro político". Dio a entender así que el camino para no cargar sobre el pasajero sería aumentar los subsidios.

Según el dato tomado por el municipio meses atrás para fundar el cálculo de la última revisión tarifaria, el transporte en Bariloche tiene unos 15 millones de usuarios anuales. Pero según Carrasco "hoy la proyección está dando apenas 13 millones".

Dijo que en una situación así "lo importante es no tirar números al azar" y admitió que "con una tarifa alta se va a caer más el número de pasajeros".

Una de las opciones ofrecidas por el intendente Marcelo Cascón en una reunión anterior fue la de aprobar con celeridad una ordenanza que permita colocar publicidad en los laterales de los colectivos.