NEUQUÉN (AN).- Hombres enfundados en trajes oscuros y subidos a unos zancos invaden las calles de una ciudad cualquiera. Hombres y mujeres de blancos que pisan esas mismas calles, cada uno en lo suyo, cada uno escribiendo su parte de la historia.
Y de repente el ensordecer ruido de la confusión, las calles que se desordenan y oscurecen. Gritos, desapariciones. escondites secretos, torturas, desapariciones y un país que inaugura un capítulo a sangre y a muerte. Un amor que nació a tiempo pero fue brutalmente interrumpido, un niño que nació entre muros húmedos.
Treinta años buscando pistas, gastando suelas en calles desoladas, removiendo mares para encontrar voces queridas y treinta años que duelen y que no se olvidan.
Eso es "Estalla silencio".