CUTRAL CO (ACC).- Dos hombres mayores de edad fueron detenidos en las últimas horas por su presunta vinculación con el homicidio que se produjo en el barrio Daniel Sáez el lunes por la madrugada. Los investigadores sostienen que están tras los pasos de un tercero y que aún falta encontrar el arma con la que se produjo el hecho.

El asesinato de Rosario Campos, de 35 años, se concretó en la madrugada del lunes en la calle Catriel y 13 de Diciembre del mencionado barrio.

La víctima fue alcanzada con al menos tres disparos de arma de fuego que le provocaron las heridas y tras haber recibido atención médica, horas después perdió la vida.

Los investigadores llevaron a cabo entre diez y doce allanamientos, en los que lograron la detención de dos hombres, mayores de edad que se presume están involucrados en el sangriento hecho.

Al parecer, de acuerdo con lo que confirmó el comisario José Montecino, los dos detenidos por lo menos estuvieron en la escena del crimen.

La policía sigue en la búsqueda de un tercero que se estima también estaría involucrado en el homicidio.

A pesar de los intensos rastrillajes llevados adelante, no se pudo dar todavía con el arma utilizada para ultimar a Campos.

En tanto, se avanza con la evaluación de las pericias y los elementos que se tomaron en el lugar para relacionarlos con las circunstancias en que se desencadenó el hecho, determinar el móvil y establecer el número de personas que participó la madrugada del lunes en el barrio Daniel Sáez.

Montecino especificó que los dos detenidos son mayores de edad y cuentan con antecedentes policiales. La investigación sigue en marcha para lograr el esclarecimiento del crimen.

Tal como informó este diario en su edición de ayer, Campos fue ultimado por los tres disparos de arma de fuego que recibió. Se supo que en una motocicleta, lo trasladaron hasta el hospital de Complejidad Media y luego se decidió su derivación hasta una clínica privada de esta ciudad. Alrededor de las 6:30 del lunes falleció.

Las lesiones de bala las tenía en el antebrazo, la mano y una nalga.

Los investigadores no se inclinaron por ninguna hipótesis, pero entre las más firmes figura un posible ajuste de cuentas.

Una de las circunstancias que deben quedar esclarecidas es si se trató de un enfrentamiento, o bien la víctima recibió los impactos cuando caminaba por el lugar. En el sitio, los uniformados levantaron al menos seis vainas servidas.

El arma utilizada para cometer el homicidio era de grueso calibre, según las heridas que recibió Campos.