A pesar del empate, que puede costarle el liderazgo si hoy gana Santamarina, todo era alegría en el vestuario de Cipolletti, y todo era coincidencia: mereció ganar en Pergamino. Cristian Martínez consideró que "en el primer tiempo jugamos muy bien, manejamos la pelota. En el segundo lo empatamos y demostramos que estaba jugando el puntero. Debimos ganarlo".

César Medina, uno de los protagonistas de la tarde, explicó la jugada del penal: "Abro los brazos para que no pase y el delantero se choca conmigo. Lamentablemente, el árbitro consideró que cometí penal". Y Mario Ávila, autor del gol albinegro, celebró el empate, pero también lamentó los dos puntos perdidos: "Estaba para ganarlo".