TOKIO (AFP).- Un pequeño incendio se declaró ayer en la central nuclear japonesa de Kashiwazaki-Kariwa (centro), la más grande del mundo, parada desde que fue dañada en 2007 por un violento sismo, hiriendo a un empleado pero sin causar una fuga radiactiva, anunció la administradora.
El incendio fue descubierto en el edificio que alberga uno de los siete reactores de la central. El fuego fue controlado en una hora y media.
Un empleado fue hospitalizado por heridas leves en el rostro, indicó la compañía eléctrica Tokyo Electric Power (Tepco).
Se abrió una investigación para determinar las causas del siniestro.
La central de Kashiwazaki-Kariwa está parada desde el 16 de julio de 2007, cuando fue sacudida por un terremoto de 6,8 de magnitud en la escala de Richter cuyo epicentro se ubicó a sólo 9 km.