El comisionado Marcelo Chiebrau, jefe de la DDI La Matanza, contó que las detenciones de los sospechosos del asesinato de Gustavo Lanzavecchia se lograron a partir de los datos aportados por testigos del lugar donde abandonaron el automóvil Volkswagen Bora del decorador.
"Se logró vincular a sujetos que vivían cerca de allí y se realizaron tareas de inteligencia en esos domicilios", explicó el comisionado.
"Nuestra hipótesis de trabajo indica que uno de los autores del hecho tenía una relación personal con la víctima. Era una persona que tenía un acercamiento directo y que la había visitado en varias ocasiones en su domicilio", indicó.
Para Chiebrau "había la suficiente confianza para que la víctima le permitiera el ingreso a esa persona junto a otros dos sujetos, que son los que también participaron del hecho".
Según el pesquisa, este "Roberto", "ingresó simulando una reunión de amigos y a partir de entonces lograron maniatarlo".
Mientras cometían el robo, llegó al lugar Álvarez Auer. "A esa altura, (los delincuentes) estaban bastante nerviosos porque no encontraban el dinero que entendían podía haber en el domicilio y la llegada del policía Álvarez terminó por alterarlos para que el hecho cobrara el salvajismo que tuvo", dijo Chiebrau. (Télam)