ZAPALA (AZ).- Con un tono conciliador el intendente Edgardo Sapag abrió ayer el período de sesiones ordinarias en el Concejo Deliberante zapalino. La necesidad de crear los consensos mínimos más allá de las diferencias políticas, la puesta en marcha de la fiscalía municipal y el anuncio de la próxima llegada de recursos para construir la nueva terminal de ómnibus asomaron como ejes centrales del mensaje.
"Han pasado 14 de meses desde nuestra asunción y considero que ha sido un lapso fructífero por la realidad vivida tanto en lo social e institucional como en lo económico y financiero", afirmó el jefe comunal.
Sapag destacó que la entrada en vigencia de la nueva Carta Orgánica Municipal generó "una adaptación en los procederes y algunas demoras". A renglón seguido anunció que le solicitará al Deliberante el tratamiento en el primer semestre del 2009 del proyecto para crear la fiscalía municipal.
En otro tramo ponderó el rol de los ediles en su primer año de gestión al advertir que "queríamos tener los menores roces posibles luego de que se generara esta alternancia política en Zapala y debo destacar que fue una experiencia positiva".
El intendente subrayó la composición heterogénea del Concejo y recordó que algunos pronosticaban una relación "tormentosa".
"Es necesario valorar el trabajo de todos para garantizar la institucionalidad y construir la gobernabilidad", enfatizó.
Sapag mencionó además las gestiones llevadas adelante con el gobierno nacional que permitirán construir la nueva terminal de ómnibus, un emprendimiento que demandará una inversión del orden de los 30 millones de pesos.