ALLEN (AA).- Una combi embistió fuertemente a un colectivo de la empresa Ko-Ko que trasladaba a unos 40 pasajeros. La colisión se produjo ayer por la mañana en Allen, justo en la intersección del acceso Güemes y la calle rural asfaltada Nº 4, un sector en el que últimamente se produjeron varios accidentes de tránsito. Afortunadamente sólo se registraron daños materiales y no hubo que lamentar heridos.
El violento choque ocurrió minutos antes de las 11 cuando la unidad Nº 89 de la empresa Ko-Ko transportaba una importante cantidad de personas que viajaban con destino a Roca. Al momento que el colectivo marchaba por el acceso Güemes y en dirección a la Ruta 22, fue embestido por una combi Mercedes Benz Sprinter.
La Sprinter -dominio GPJ 984- era conducida por Ernesto Martínez Efraín (48) y pertenece a la empresa neuquina "Erma". Se movilizaba en sentido Este - Oeste por la calle rural e impactó contra uno de los laterales del colectivo.
Luego del accidente y a simple vista se podía apreciar una clara frenada de unos 40 metros sobre el asfalto rural. Los carteles indicadores que se colocaron hace algunos días y una extensa franja amarilla pintada recientemente sobre la cinta asfáltica no sirvieron para que el conductor de la Sprinter llegara al cruce con menos velocidad.
"Yo venía muy despacio porque unos metros antes había frenado para que desciendan dos pasajeros", indicó Leandro Veron (58), chofer del colectivo. Pocos minutos después de la colisión, los 40 pasajeros que viajaban en el Ko-Ko fueron trasladados a otra unidad y continuaron camino a Roca. Afortunadamente todos los involucrados en el accidente resultaron ilesos.
La Mercedes Benz quedó con la parte delantera completamente destruida, mientras que el colectivo sólo presentó un abollón en el lateral izquierdo. Hubo que recurrir a un tractoelevador para retirar a la Sprinter, que había quedado sobre el cruce. Luego, los bomberos voluntarios debieron realizar tareas de limpieza sobre el asfalto para retirar los restos de la combi y algunas manchas de lubricante.
La intersección del acceso Güemes y el camino asfaltado se ha convertido en un peligroso punto, un sector donde durante los últimos días se registraron algunos accidentes que podrían haber terminado en tragedia. Por caso -hace poco más de 20 días- un Fiat Regatta y un taxi Fiat Siena colisionaron en el mismo lugar y con la misma dureza. Una larga fila de tamariscos que cercan una chacra obstaculiza la visión de los vehículos que circulan por esa zona.