Al presentar su proyecto d epresupuesto, PObama prometió romper con la tradición de su predecesor, George W. Bush, de ocultar los gastos y esconder los verdaderos costes de la guerra en Irak y Afganistán, dijo el presidente. Según él, ya no habrá más "contabilidad fraudulenta".
De nuevo, la mayoría de los fondos, 673.000 millones de dólares, están destinados a Defensa. Para los próximos dos años, Obama pidió 205.500 millones de dólares adicionales para las guerras en Irak y Afganistán.
Al mismo tiempo, advirtió sobre un eventual recorte en la compra de sistemas de armas de altos costos. El mandatario propone que el presupuesto del Departamento de Defensa sea de 533.700 millones de dólares, lo que equivale a un aumento del cuatro por ciento en relación a las cifras de 2007.
A dicha suma se añadirían 130.000 millones de dólares que estarán dirigidos a sufragar los gastos de los conflictos de Irak y Afganistán. Obama se pronunció a favor de recortar los gastos en sistemas de armas de alto costo de la época de la Guerra Fría, que tienen poca utilidad en los actuales conflictos. Uno de los equipos cuestionados podrían ser las naves de la Fuerza Aérea F-22 Raptor. (DPA/AFP)