NEUQUÉN (AN)- Pese a los innumerables reclamos y perjuicios que la sequía ocasiona en la zona, la falta de lluvias llevó a que en la ciudad de Neuquén e inmediaciones disminuyera notablemente este verano la presencia de moscas y mosquitos. Desde la dirección municipal de Zoonosis se advirtió que la cantidad de reclamos vinculados a tales insectos disminuyó a tal punto que no hubo ninguna queja.
"La falta de lluvias en los últimos meses no permitieron la acumulación de agua en charcos y tarros que son el caldo de cultivo para las moscas y mosquitos, entre otros insectos, y por eso hubo una notable disminución en su presencia", aseguró el subsecretario de Gestión Ambiental del municipio, Carlos Roca.
El funcionario explicó que "si bien cuando hay altas temperaturas como las que tuvimos este verano se potencia la eclosión o el surgimiento de insectos, la falta de humedad y sobre todo de lluvias actuó en contra todas las especies cuyas larvas crecen en el agua". Roca indicó que "entre los insectos que se detectó una notable reducción están los mosquitos, las moscas y algunos tipos de avispas".
La advertencia del funcionario fue ratificada por los registro de reclamos recibidos por el personal de la dirección de Zoonosis, en donde en enero se recibieron casi un 9% menos de quejas y de las cuales ninguna estuvo vinculada a este tipo de molestos voladores.
"Salvo en los lugares que están cerca de los ríos o de canales y desagües, la presencia de moscas y mosquitos fue casi nula", aseguró Roca, aunque indicó que "en los jardines donde se riega en abundancia también pudieron surgir pero de forma aislada".
No obstante, así como la disminución de este tipo de molestos bichos del verano llevó también a una menor presencia de otros animales asociados a ellos como los sapos, otras especies proliferaron con mayor fuerza y fueron precisamente las que encabezaron el ranking de las quejas ante Zoonosis.
"Si bien el crecimiento no es muy alto en comparación con el año pasado, los reclamos por la presencia de arañas viudas negra fueron los más usuales y de hecho representan la mitad de los reclamos recibidos en todo enero", aseguró Roca a la vez que explicó que "las viudas negras son una especie autóctona y la sequía y los vientos que tuvimos potencian que aparezcan sobre todo en las casas que están en la zona de la meseta".
El funcionario señaló que "tuvimos cerca de 30 reclamos por viudas negras sobre las 40 denuncias que recibimos y si bien parece mucho el año pasado habíamos tenido sólo un par menos de reclamos por viudas negras, que se veían disminuidos porque había más denuncias por otras plagas".
Junto a estas arañas, entre las quejas más frecuentes se hallaron también las referidas a chinches y cucarachas. "Mal que mal, la sequía al menos nos dejó un verano con menos moscas y mosquitos que son sin dudas los insectos que a nadie le gustan", concluyó.