Los pobladores de Chaitén en el sur de Chile recurrieron a la justicia para poder quedarse en su pueblo, cercano al macizo, y evitar ser evacuados como busca el gobierno ante el recrudecimiento de la actividad eruptiva desde hace tres días.

El recurso fue presentado ante los tribunales la tarde del sábado por el abogado Jaime Moraga en representación de unos 70 vecinos del pueblo de Chaitén, que han regresado en los últimos días al lugar.

El jueves, al reactivarse el volcán, unos 160 vecinos del pueblo fueron evacuados en medio de nubes de ceniza y la explosión de material incandescente, pero algunos se resistieron a hacerlo y otros han vuelto en los últimos días.

"Buscamos proteger los derechos de libertad de tránsito, de reunirse, a la salud, a la educación, a la vida y a la protección de los bienes", señaló el jurista en su presentación.

El pueblo de Chaitén, a unos 1.200 km al sur de Santiago y a escasos 10 km del volcán, quedó devastado tras la primera erupción el 2 de mayo de 2008, que provocó aluviones que lo inundaron y destruyeron.

El gobierno y expertos temen que ahora ocurra lo mismo, en un escenario agravado por la intensidad de las lluvias que podrían provocar aluviones que arrastrarían material volcánico.

Según los habitantes de Chaitén, el gobierno de la presidenta Michelle Bachelet no ha hecho todo lo posible por protegerlos, como levantar barreras para evitar desbordes de ríos.