La diputada nacional Marta Velarde, la primera que dejó el bloque kirchnerista por el conflicto del campo, aseguró ayer que "no se ha cerrado aún" la serie de alejamientos de legisladores de las bancadas oficialistas en Diputados y el Senado.
"Para los autoritarios, discernir es un claro signo de traición que hay que castigar y, sobre todo, doblegar", manifestó la diputada peronista opositora al referirse a la salida de cuatro senadores del bloque K.
"Resulta insostenible una convivencia imposible entre la dignidad y la humillación, por lo que no tengo dudas de que este camino iniciado tanto en Diputados como en Senadores no se ha cerrado aún", consideró la legisladora. "Para aquellos que hemos decidido renunciar, sabemos del significado de dejar al gobierno que creíamos nuestro y al bloque con viejos compañeros, ante la opción entre ser leales a las instituciones y a los intereses del pueblo de nuestras provincias", consideró. (DyN)