Parco pero sereno, Carlos Reutemann sorprendió ayer al afirmar que "están disminuyendo" las posibilidades de que vaya por la reelección como senador santafesino en las próximas elecciones de octubre. Y aunque volvió a diferenciarse del Gobierno, aseguró que no se integrará a ninguna de las dos alianzas anti-K que se están conformando, la de Carrió con el radicalismo y la de Macri, Sola y De Narváez. De este modo, el ex piloto de Fórmula 1, montó otra vez una escena en la que parece sentir muy cómodo: generar incertidumbre en todo el arco político.

En una conferencia de prensa convocada para dar cuenta de su estado de salud luego de una intervención coronaria, el legislador justificó su decisión de abandonar el bloque del Frente para la Victoria ya que, dijo, asumió una "posición distinta" frente al resto de los integrantes de la bancada en los últimos tiempos.

En ese sentido, dijo que varias veces pidió que "se revea" la política agropecuaria oficial y que "se empiece a dialogar (con los empresarios agrarios)". Además, recordó que, a casi un año del inicio de la guerra gaucha, el conflicto con el campo sigue irresuelto.

"Nadie me escuchó y hasta el día de ayer nunca vi que haya alguna vía de solución", disparó el Lole.

Si bien se mostró respetuoso con Cristina (admitió que siente "afecto personal" hacia ella), Reutemann cargó contra la política agraria de su administración y con la actual coparticipación impositiva. Aunque señaló que él y su compañera de la naciente bancada Santa Fe Federal, Roxana Latorre, seguirán "acompañando los proyectos" del oficialismo. De hecho, el ex corredor votó a favor de la reestatización de las jubilaciones y de Aerolíneas Argentinas y Austral.

Sin embargo, señaló que sus diferencias con el kirchnerismo no lo acercan a las flamantes alianzas antiK. Descartó que haya hablado con Carrió (por quien, dijo, siente admiración), Rodríguez Saá o Duhalde, así como con el PROperonismo.

El ex corredor de Fórmula Uno dijo que su renuncia al bloque apunta a poder "cumplir con el mandato de los que me eligieron" en Santa Fe. Además, desmintió que se hubiera opuesto a una eventual candidatura del diputado ultraK Agustín Rossi, que finaliza su mandato este año.

Rodeado de sus médicos, Reutemann reveló que las "únicas personas" que lo llamaron para conocer su estado físico fueron el vicepresidente Julio Cobos, el diputado Felipe Solá y el ex intendente Horacio Usandizaga.

Fiel a su estilo, Reutemann evitó definiciones contundentes, confesó "afecto personal" por la presidenta Cristina Kirchner y buscó mostrarse alineado con los intereses del sector agropecuario. "Es una fábula que el campo no tiene votos", dijo.

Luego de insistir con que tanto él como Latorre son peronistas y acompañarán los proyectos del oficialismo, fue enfático al señalar que ambos defenderán a "capa y espada" los intereses de la provincia. "Una provincia que genera muchos fondos para la Nación, pero que no recibe lo que tiene que recibir", remató.

Desde la Rosada se siguierno con atención las declaraciones del ex piloto, pero por orden de Kirchner ningún funcionario se refirió al tema. Reutemann había sido anunciado como uno de los posibles presidenciables por el kirchnerismo para el 2011.