| La torre del palacio municipal forma parte de la identidad de San Martín, pero desde hacía años arrastraba una vergonzante pérdida: el reloj que había salido de funcionamiento y sus agujas se mantenían clavadas en el olvido. Una década después de aquel desperfecto que privó a todos del típico "gong", desde las cuatro caras de la torre, el municipio volvió a poner en funcionamiento los inmensos engranajes de la máquina, en el marco del plan de reformas del edificio municipal. Según se consignó desde la oficina de Prensa de la comuna, el objetivo es lograr un mejor mantenimiento de los espacios y edificios de San Martín de los Andes, por lo que en ese contexto se recuperó el reloj.
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