- Cipolletti es difícil para usted. Hoy es Weretilneck, pero la legisladora Milesi ya había pedido su renuncia por lo de Aguirre (el amigo de Cufré juzgado por el crimen de la bioquímica Zerdán).

- En la Legislatura, en el 2007, se aprobó por unanimidad que cualquier persona no condenada puede aspirar a cubrir cualquier cargo público, aún estado procesado. Entonces qué cuestionamiento puede tener la persona que está al lado suyo si usted no es ningún delincuente.

- ¿Pero no admite que las cenas de fin de año y de Las Grutas no fueron acertadas?

- Mis actos personales los hago con conciencia y la labor de la Policía de Río Negro no hace distinción ni de raza ni de estamentos sociales. Me puedo sentar con usted, entrar al último ranchito o con una persona que haya estado procesada y hasta que haya estado presa. Se necesita comunicación con esa gente para poder brindar respuesta a toda la sociedad.

- Pero el caso de la cena en Las Grutas es distinto...

- En esa cena había más de 100 personas y había funcionarios del gobierno también. Son cosas banales, se está perdiendo tiempo y ocupando a la sociedad en cosas insignificantes.

- Se escuchan varias críticas. ¿Recoge algo de ellas como para corregir?

- Fui acusado de manejar la prostitución de Río Negro, la defensora lo ha dicho. Es la opinión de ella. La Justicia comenzó a investigar si hay delito o no en las acusaciones, hay varias causas abiertas. Como la de Valle Medio donde se decía que yo manejaba la prostitución. Creo que la última vez que ingresé a un cabaret fue en Viedma cuando rescatamos a una menor de 15 años. (AV)