En una importante victoria para el presidente Barack Obama, los demócratas lograron la aprobación de un plan de estímulo económico por 787.000 millones de dólares en el Congreso el viernes por la noche. El proyecto de ley espera combatir la peor crisis económica desde la Gran Depresión.

La oposición republicana fue casi unánime. Después de cabildear enérgicamente para lograr la aprobación de la iniciativa, se espera que Obama la firme en los próximos días, a casi un mes de haber asumido el cargo.

El Senado aprobó la medida por 60 votos a favor y 38 en contra, con el apoyo crucial de tres republicanos moderados _los únicos integrantes de su partido que la respaldaron. El senador demócrata Sherrod Brown emitió su voto decisivo después de volar en un avión gubernamental a la capital desde Ohio, a donde asistió a las exequias fúnebres de su madre.

Horas antes, la Cámara de Representantes aprobó la medida por 246-183, con todos los republicanos oponiéndose al paquete de recortes fiscales y gasto federal que Obama ha puesto en el centro de su plan para la recuperación económica del país. Los simpatizantes de la iniciativa dicen que puede salvar o crear 3,5 millones de empleos.

El líder de la mayoría demócrata en la Cámara de Representantes, Steny Hoyer, aceptó que no hay garantías de esto, pero dijo que, ``millones y millones y millones de personas recibirán ayuda luego de perder sus trabajos y no poder llevar sustento a sus familias''.

Con una oposición declarada, el líder republicano en la cámara de baja, John Boehner, dejó caer una copia de la iniciativa de 1.071 páginas al piso en una muestra de desdén. ``La iniciativa que era sobre empleos, empleos y empleos se convirtió en una iniciativa de gasto, gasto y gasto'', dijo.

El proyecto de ley es uno de los más costosos que se hayan discutido en el Congreso y otorgará millones de dólares en ayuda a las víctimas de la recesión a través de seguros por desempleo, cupones alimentarios, servicios de salud, capacitación para el empleo y otros programas. Decenas de miles de dólares serán destinados a los estados para compensar los recortes que de otra forma realizarían al presupuesto de las escuelas y los gobiernos locales, y hay más de 48.000 millones para proyectos de transporte como la construcción de carreteras, puentes y autopistas.

AP