CHOLILA (AEB). Al menos treinta mil visitantes pasaron este fin de semana por el predio de la Fiesta Provincial del Asado para comprobar que en este pueblo de montaña "se come la mejor carne".

Los lugareños aseguran que el secreto está "en la calidad de los campos de cordillera, el pasto de sus mallines y las mejoras genéticas bovinas introducidas en los últimos años, que han potenciado a este sector productivo, al punto de colocarlo como el principal proveedor de la región".

Lo concreto es que buena parte de la idiosincrasia patagónica sigue viva por estos pagos, donde los turistas no dejan de asombrarse con las usanzas campesinas y la interacción del hombre con caballos y vacas, con las jineteadas, las populares cuadreras y el juego de la taba.

Unos once mil kilos de costillares y cuartos de las mejores vaquillas, más 300 corderos que se doraron bajo las llamas de leña traída especialmente de los bosques cercanos, dieron lugar "al asado más grande de la Argentina" -decían-, al punto que a partir del año que viene el evento tendrá carácter nacional.

El municipio local, encabezado por Miguel Castro, puso énfasis en un predio que mostró sus mejores galas, con nueva infraestructura que facilitó que el público pudiera almorzar o cenar cómodamente sentado. En ese ámbito, gauchos de sombrero y cuchillo a la cintura contaban sus vivencias a puebleros asombrados de tanta simpleza.

Sobre el escenario, en tanto, la música de los artistas locales despertó más entusiasmo que el propio Abel Pintos, ya bastante alejado del folklore. El pequeño acordeonista Fabricio Bonansea levantó a la multitud a puro chamamé, lo mismo que Marijó Díaz, una chica no vidente que anduvo muy cerca de ganar en Cosquín, en enero. Pancho Quilodrán Cides, Gabriel Santana, Alfredo Blanco y Daniel Terraza hicieron el resto. Anoche, al cierre de esta edición, se elegía a la nueva reina y a Miss asadito, para terminar con un bingo con 20 mil pesos en juego.

Por otra parte, la visita del gobernador chubutense para inaugurar la fiesta volvió a marcar los privilegios que ha tenido Cholila en cuanto a la inversión pública: nuevas avenidas asfaltadas e iluminadas, más viviendas y redes de servicios se van a complementar ahora con otro programa anunciado y que implicará 8 millones en obras.

Además, cabe recordar que durante este año esperan terminar los 30 kilómetros de pavimento que la unen con el resto de la Comarca Andina y que ya fueron adjudicados los trabajos para comenzar con la ruta hacia Esquel, a través del Parque Nacional Los Alerces, que se llevará un poco más de 100 millones de pesos.

Ambos emprendimientos terminarán de definir el perfil netamente turístico y productivo de los valles intermontanos que guardan rincones con lagos y bosques de indescriptible belleza.