Saturado por la situación Ariel Ortega dio ayer por cerrada la posibilidad de volver a River para intervenir en el torneo Clausura y confesó sentirse "manoseado" por los dirigentes "millonarios". Es más, Ortega dejó entrever que si dependiera de él hasta evitaría regresar en junio al club de Núñez debido a lo desencantado que está con las autoridades.
"Para mí ya está", arguyó Ortega en declaraciones para el programa Un Buen Momento que se emite por La Red. "Me parece que esto no es serio, yo tengo sentimientos y orgullo, y más allá de que ame a River no es justo lo que están haciendo conmigo", argumentó el Burrito en lo que pareció una sentencia para las chances de volver en lo inmediato a su club de origen. "Si pudiera hacer otra cosa lo haría, pero mi obligación es volver a River".
Por su parte, y con respecto al interés de Estudiantes para que se sume a sus filas, Ortega reconoció que habló con el entrenador Leonardo Astrada y el capitán Juan Sebastián Verón y les explicó que era "imposible", porque está muy bien en Mendoza y, además, River es el dueño de su pase. "Estoy agradecido que un club grande como Estudiantes se haya fijado en mí", afirmó Ortega.
