NEUQUÉN (AN) - Lolín Rigoni, de Madres de Plaza de Mayo de Neuquén, y Oscar Ragni, de la Corriente por los Derechos Humanos de Neuquén y Río Negro, se manifestaron disconformes por la decisión de los jueces del Tribunal Oral Federal (TOF), de no realizar una audiencia para dar a conocer los términos de la sentencia que condenó a los militares por su responsabilidad delitos contra la humanidad, en la causa por el funcionamiento del centro clandestino de detención "La Escuelita".
"Nos dijo que habían hecho una reunión -entre los miembros del cuerpo- y que como iban a tener dos o tres días para leer las 700 paginas de la sentencia, optaron por entregar una disquet con los fundamentos a todas las partes", dijo Lolín Rigone, tras hablar con el vocal Oscar Albrieu.
"Le dijimos que para nosotros es una falta de respeto no habernos avisado" con anticipación de esa decisión.
Pero "nos dijo, ´sí señoras, tienen toda la razón, tendríamos que haber hecho una pequeña audiencia con los querellantes, los defensores, las madres, los organismos de derechos humanos. Pero a todas -las partes- les pareció mejor que les diéramos un disquet para que cada uno lo lea y después hacer los planteos que quieran hacer´".
Destacó la actitud de Albrieu de atenderlos y dijo que desde Madres de Plaza de Mayo dan por concluida esta etapa.
Por su parte Oscar Ragni sostuvo que "no era lo que esperábamos, porque cuando se leyó el fallo desde el Tribunal se estableció que el 23 de febrero se iba a dar lectura a los fundamentos".
Añadió que "no entiendo y no lo esperaba, porque el concepto que tenemos del desarrollo del juicio es excelente. Hemos concurrido a todas las audiencias, el Tribunal me merece todo el respeto, hizo un trabajo profesional excelente, pero se debió hacer una audiencia para dar a conocer sentencia, los fundamentos son una parte muy importante del juicio, son una parte muy importante del proceso".
Cuando se le preguntó si creía que no se convocó a una audiencia ante un eventual temor a que se repitieran los incidentes de diciembre, cuando se dio el fallo, lo descartó de plano.
Sin embargo, señaló que cree desde hace mucho tiempo "desde el poder político, a los más altos niveles hay una intencionalidad de que los juicios a los militares, por el terrorismo de Estado y por el genocidio de aquellos tiempos, no avancen".
