CIPOLLETTI (AC).- Confesó en sede policial cuando lo apresaron, pero ayer al ser llamado a indagatoria, Alex Barrientos Velázquez se abstuvo de declarar. Tras esta instancia, y a pedido de la defensa, el juez Gustavo Herrera ordenó que el detenido por el crimen de Agostina Mazzina sea sometido a pericias médicas.
"Se designó un plantel integrado por un médico forense, dos psicólogos forenses y dos psiquiatras, a fin de que analicen la situación mental del acusado", se informó.
Mientras, el sospechoso por "homicidio agravado por alevosía y ensañamiento" será alojado en una unidad policial que reúna algunas condiciones específicamente establecidas por el tribunal. "Esto no implica que tenga ningún privilegio", aclaró Herrera.
"Hasta que la junta se expida sobre la situación del detenido, el sujeto es imputable y más allá del lugar donde será alojado, tendrá el tratamiento común a todo detenido", agregó el juez.
Por otra parte, el magistrado ordenó que se le extraiga sangre al sospechoso para determinar la cadena de ADN, entre otras pruebas.
Barrientos Velázquez fue llevado ayer a la mañana a los Tribunales de Cipolletti. Como era de esperar, su defensor Alejandro Silva no permitió que declarara. Pero tampoco el detenido tuvo intenciones de hacerlo, comentó Silva.
Pese a que el lunes en la comisaría Cuarta Barrientos Velázquez confesó ante dos testigos que él mató a Agostina, ayer no tuvo interés en hablar. Fue escueto incluso ante su propio abogado.
Silva dijo que se abstuvo y que a fin de determinar el estado de salud mental de su asistido le pidió al juez que se le practique una pericia psiquiátrica. Además, solicitó que se traslade a Velázquez Barrientos a algún lugar especial, para resguardar "su integridad física y la de terceros".
Luego de este pedido Herrera ordenó la pericia y nuevas condiciones de detención.
Silva, teniendo en cuenta los dichos del sospechoso respecto de que escuchaba "voces" que le decían que "tenía que salir a matar", apunta como estrategia defensiva a que Barrientos Velázquez sea declarado inimputable, es decir, que se demuestre que a la hora de asesinar a Agostina no comprendía qué estaba haciendo. Es más, evalúa pedir su excarcelación.
Si bien queda la pericia médica pendiente, con el llamado a indagatoria corren los diez días hábiles para que se defina la situación procesal.
En tanto, anoche un grupo de vecinos de esa ciudad se reunía en la plaza con la finalidad de definir acciones contra la inseguridad. Pensaban elaborar un petitorio para entregárselo al intendente Juan Reggioni.