VIEDMA (AV).- El propietario y un empleado de una conocida rotisería de Viedma, resultaron víctimas de un asalto a mano armada. Fue a primera hora de ayer apenas abrieron el negocio ubicado en Zatti a metros de Colón , en el radio céntrico viedmense. Uno de los asaltantes -que sería menor de edad- fue demorado poco después del hecho en la vía pública y el otro -un adulto- que si bien hasta la tarde de ayer no había sido detenido, estaría identificado.
En la tarde de ayer se realizó en Tribunales una rueda de reconocimiento y el juez penal de turno dispuso que el menor continuara demorado y hoy podría citarlo a declarar en indagatoria. Varios serían los testigos que habrían observado el movimiento de los delincuentes, tanto en el interior del negocio como en la vía pública. Además, datos importantes podrían arrojar las imágenes de una cámara de una empresa de trasporte de caudales que se levanta al lado de la rotisería y que en forma permanente registra el movimiento de la vereda.
Según se supo, el hecho ocurrió aproximadamente a las 8 de ayer en momentos en que ingresaron al local uno de los propietarios y un empleado por el portón del local y una puerta lateral a la del ingreso del público. Una heladera entreabierta llamó la atención del dueño que volvió a salir en busca de mercadería y cuando regresó al interior del salón de cocina se sorprendió al observar que el empleado se encontraba como arrodillado.
Lo primero que se le ocurrió pensar fue que estaba descompuesto pero no terminó de preguntarle qué le sucedía, cuando la presencia de los dos delincuentes armados le explicaron todo el cuadro de situación.
El propietario fue también obligado a tirarse al piso y maniatado mientras era amenazado con el arma de fuego. Les sacaron a ambos las billeteras, un celular y mientras se les exigía la entrega del dinero bajo una constante amenaza. El ruido de un vehículo que estacionaba en el mismo portón aumentó la tensión, sobre todo cuando ingresó el proveedor junto a otra persona. Ante semejante situación estos dos últimos se trabaron en un forcejeo con los asaltantes hasta que uno de ellos golpeó al proveedor con el arma de fuego en la cabeza.
Los gritos, la resistencia y el dinero que no aparecía habrían generado la huida de los delincuentes. Minutos después se produjo la demora de un joven de 16 años. El otro estaría identificado y era intensamente buscado.