Las raciones diarias oficiales garantizarán un 50% de las 2.300 calorías diarias que debe recibir un alumno en proceso de crecimiento. Un 20% lo deberá aportar el desayuno mientras que el resto quedará para el almuerzo, indicó a "Río Negro" el asesor nutricional de la cartera educativa, Jaime Córdoba. Los productos frescos como carne, huevos y leche, agregarán 22 gramos de proteínas. El convenio avalará las 2.300 calorías en promedio en las escuelas hogares como consecuencia de que habrá que incluir las cuatro comidas.
Córdoba introdujo un elemento polémico. Desde el punto de vista alimenticio, los preelaborados otorgaban la misma cantidad de calorías, pero con una diferencia: el consumo era menor, de acuerdo a las quejas de la directoras, en virtud de que los chicos se mostraban "cansados" de comerlos. "Los alimentos naturales le dan un sabor diferente y además no es lo mismo abrir un paquete de arroz con cebollas que hervirlo aparte y luego agregarle la cebolla recién picada", afirmó a continuación.
El golpe contra los preelaborados lo dio el Instituto Nacional de Alimentos (Inal). Clasificó a la leche que entregaba Flavors-Masily como clase II, lo que determina la existencia de un riesgo probable que puede ocasionar un posible perjuicio en la salud de quienes la consumen. El año pasado, el gobierno rionegrino debió suspender la provisión de este tipo de alimentos.
Los controles determinaron que tampoco se ajustaban al CAA otros productos. El arroz madrileña y la salsa estofada contienen grasa animal, las torrejas de cereal no tienen suficiente hierro, los ñoquis de papas "fortificados con vitaminas y minerales", polenta portuguesa "fortificada con vitaminas y minerales" y arroz multiaplicación "fortificado con vitaminas y minerales".
Además de la convulsión política se presentó una demanda penal. (AV)