MOSCÚ.- Un nuevo patriarca tomó las riendas de la Iglesia Ortodoxa Rusa para convertirse en el primer líder de la mayor Iglesia Ortodoxa del mundo en llegar al cargo tras la caída de la Unión Soviética.
Kirill, un veterano diplomático de la Iglesia y cauteloso promotor de cambios, se convirtió en el 16° patriarca en una ceremonia en la Catedral de Cristo Redentor, la iglesia más opulenta de Moscú y símbolo del renacimiento de la fe ortodoxa. La iglesia original del siglo XIX fue dinamitada por orden del dictador soviético Josef Stalin en 1931, pero reconstruida a finales de los ´90 tras el colapso de la Unión Soviética.
La catedral se llenó de cánticos ancestrales, humo de incienso y feligreses con cirios en la mano durante la ceremonia en la que Kirill, de 62 años, lució diversos vestuarios.
Clérigos importantes, además del presidente ruso Dmitry Medvedev, el primer ministro Vladimir Putin y numerosos funcionarios de Rusia y el exterior, asistieron a la ceremonia.
"Éste es un evento que abre un nuevo nivel de desarrollo de la ortodoxia en nuestro país y crea, esperamos, nuevas condiciones para un diálogo pleno de solidaridad entre la Iglesia Ortodoxa Rusa y el Estado´´, dijo Medvedev al final de la ceremonia que fue transmitida en vivo por la televisión estatal.
Kirill fue elegido el martes por un consejo de los principales clérigos de la Iglesia, monjes y electores laicos, incluyendo funcionarios del gobierno y empresarios. Kirill, que encabezó el departamento de relaciones exteriores de la Iglesia, sucede al patriarca Alexi II, que falleció en diciembre tras casi dos décadas en el puesto. (AP/DPA)